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CNCO The Perver Game (1-23)

 


1

―TN no te olvides del pasaporte―Me dice David. 

Estoy harta de oír su voz. Habla tanto que puedo oírlo hasta en mis sueños. 

 
Asiento y me volteo hacia un lado a poner los ojos en blanco sin que se de cuenta. De verdad, me tiene muy pero que muy cansada.

 
―No sé de cómo voy a pasar estos meses sin ti. Creo que moriré.

 
Blablablablablah es todo lo que puedo oír.

 
―Yo creo que estarás bien―le digo y le doy un pequeño beso en los labios.

―Adiós amor.

―Adiós.

 
Uff. Salgo de la habitación y siento como si me hubieran quitado un gran peso de encima. 

David y yo ya no somos ni de lejos lo que éramos antes. Él lo sabe, yo también, y por alguna extraña razon hemos estado pretendiendo que todo está bien.

 
Nos conocimos cuando éramos niños. Fuimos novios toda la primaria. Él se mudo y no nos volvimos a ver... la típica historia hasta que PUM, me lo encuentro en la Universidad.

Amazing

 
Al principio conectamos mucho, no lo puedo negar. Yo estaba contenta de ver un rostro familiar y supongo que también él. Y mientras un día te invito al cine y al otro veamos una peli en mi habitación... inevitablemente surgió la chispa. Y así llevamos ya dos años y medio. 

Si, todo ese tiempo.

 
Pero hace muchísimo ya, incluso más de un año que sé que lo que siento por él no es más que una profunda amistad (barra odio). Pero claro, si le digo a mis padres que he roto con David Rockefeller, heredero de la compañía Rockefellwer y del equipo de futbol más importante del país les daría un ataque.

 
Si. Me obligue a mi misma a estar con él aún cuando sentía que no lo quería. Todo por mis padres, y porque pensé que realmente no iba a ser la gran cosa, que podíamos tener una relación calmada, casual, relax. tú por tu lado y yo por el mío. Pero... a medida que pasaban los días me buscaba cada vez más y más, hasta llegar al punto en el que quiere saber lo que estoy haciendo a cada minuto, quiere controlar que comemos, donde cenamos, quiere que estudiemos juntos todas las semanas e incluso a veces me dice que ropa debería de usar.

 
Demoré un demasiado, pero finalmente ya comprendí que no es sano estar con una persona así y ahora estoy decidida a dejarlo.

*Suspira*
 
Ojalá fuera fácil. 

Pero bueno, tengo un mes entero para pensar en ello. Aunque por ahora creo que le dire algo como: Este tiempo que pasamos separados me ha servido para darme cuenta de que no estamos hechos el uno para el otro. Tú te mereces alguien mejor que yo blablablah.

 
Algo vibra en mi bolsillo. Mi teléfono

 
Todavía no te has ido y ya te extraño.

Es un mensaje suyo. Por supuesto que es un mensaje suyo. Me volteo y está ahí en la puerta sonriéndome como un bobo no enamorado. Corre hasta mi, me besa en la boca y luego me besa en la frente. ¿Qué está intentando hacer? ¿La despedida romántica de las películas?

 
―Ahora sí―dice finalmente―Adiós amor de mi vida.

¿De mi vida? Tú estás loco. ¿Por qué finges?

 
Le devuelvo una sonrisa fingida y sigo caminando lo más rápido que puedo.

 
Ahora si David Acosta Rockefeller. Por fin voy a ser libre de ti.


2

Dos horas y media de vuelo son suficientes para que a cualquiera se le duerman los pies. Voy caminando suavemente, porque creo que en cualquier momento me voy a desplomar como gelatina.

 
Algo vibra en mi bolsillo. Mi telefono

 
Imagino que ya llegaste. Responde para saber que me  extrañas, corazón corazón.

Por supuesto que es un mensaje suyo.

 
He llegado bien, ahora estoy ocupada. Hablamos luego,  no corazones.

 
Argh.Me tiene tan cansada.

Cruzo la avenida con mucho cuidado y por fin estoy aquí. En la mítica disquera Lila Verse Records.

 
Me siento como si estuviera en un sueño. Soy la fan número uno de este lugar.

 Lila verse es mundialmente conocida por el exito que ha tenido en menos de tres meses desde su fundación. ¿Qué cómo lo hizo? Sencillo: Se dedica a relanzar las carreras de artistas poco valorados por sus anteriores disquerosas pero que posean una poderosa fan base. Con la promociónn y los recursos adecuados hacen de cualquiera una estrella. O sino que le pregunten a Dickie.

 
Dickie era un artista urbano poco conocido que llevaba más de dos año sin conseguir un hit internacional, dado a que su antigua disquera invertía muy poco en él. Lo forzaban a sacar album tras album pero con poca promocion. ¿Qué tan lejos se supone que llegaría?

 Desde que se cambió a Lila Verse Records ha conseguido dos hits internacionales en dos meses y su album ya se encuentra entre los diez más venidos del año, con colaboraciones como Cardi B y Paulo Londra la carrera de este chico ha pasado de estar por los suelos  a volar por todo lo alto.

 
Pero yo no estoy aquí para ser una artista. Claro que no. Yo estoy aquí para ser contratada como asesora financiera y/o directora de marketing.

 
Bueno, todavía no, pero en un futuro claro que si. Mi sueño siempre ha sido trabajar en un lugar donde tengan claro que hay que hacer para ganar dinero. Y de seguro que Lila Verse lo tiene..

 
Miles de universitarios aplicaron para conseguir este mes de becarios, pero solo tres lo logramos. Yo, un tal Jason Braud y la chica más extravagante de todo mi campus: Larissa Ballarta.

 
Algo vibra en mi bolsillo. Mi telefono

 
¿Cuentame que haces? ¿Estás pensando en mi? Yo ya te extraño horrores.

 
Decido dejarlo en visto. Aunque sé que después voy a tener que explicarle por qué lo hice y jurarle y perjurarle que realmente estaba ocupada y no que quería pasar de él. O peor, que lo estuviera engañando.

 
―Hola. ¿Eres TN Fallom?―asiento―MI nombre es Jason Braud será un placer compartir este mes contigo.

 
Me extiende la mano y se la acepto. Este chico parece muy agradable, me esta sorniendo y por primera vez en mucho tiempo veo en un hombre una sonrisa sincera y no una controladora.

 
―Siento llegar un poco tarde―le dije.

 
―No te preocupes, aún falta alguien más.

 
Asi es. Larissa Ballarta. Que pereza.

Odaiba la idea de competir con Larissa, si había una persona que podía hacerme sentir pequeñita en cuestion de segundos era ella. Nunca habíamos cruzado la palabra pero sabía muy bien quién era. Todo el mundo la conocía.

 
Nos quedamos allí de pie, charlando tranquilamente con nuestras maletas escuchando la conversación. Hasta que por fin se dignó a aparecer.

 
No sé porque senti como si se acercara hacia nosotros caminando a camara lenta. Con sus aires de ganadora y sus tacones finos combinados con su falda roja ceñida que se ajustaba perfectamente a sus caderas, los pecchos que le sobresalian de la blusa escotadisima y su melena roja.

 
Jason se quedó boquiabierto el verla. Lo observe babeando por ellla, y como no hacerlo si por mucho que me costara admitirlo estaba muy buena.

 
Estar compitiendo con alguien asi es estar en total desventaja. Unas palabras bonitas a cualquiera de los jefes y  el puesto sería suyo. Que injusto.

 
―Tn Fallon―dijo en un tono cuidadoso. Me sorprendi de que supiera mi nombre―Que bueno ver a alguien del campus. Seremos besties―y luego me abrazó.

¿Qué?

  
Jason se quedó boquiabierto observandonos. No me puedo ni imaginar lo que habrá pasado por su mente.

 
―¿Me conocoes?

 
―Por supuesto―dijo ella―Pensé que yo sería la primera en ser elegida para esto. Pero resulta que no, una tal TN Fallom me había arrebatado el puesto.

 
JA, Bitch

―¿La suerte es que estoy aquí de todos modos no?―y sonrió. 

Oh oh.Su sonrisa no era buena. Era una sonrisa falsa y perversa, pretendía decirme quiero que seamos amigas, pero en realidad era: Te la tengo jurada por ser mejor que yo.


3

Una vez estuvimos los tres ya pudimos cruzar las puertas giratorias de  la maginifca Lila Verse.

 Cuantas veces había soñado con esto, con poner los pies finalmente en una compañia en la que combinaran el hacer dinero y el respeto por los artistas.

 
Pero cuando estuvimos del otro lado me lleve una tremenda sorpresa. No eran las tranquila y elegante compañía que yo pensaba que sería. Bueno, elegante si, pero tranquila desde luego que no.

 
El vestibulo estaba decorado con afiches y certificaciones de discos de oro y de platinium de Dickie y su album Trap Gold. Había dos sillones esperando a ser ocupados y una alfombra rojo vino circular que se extendía en el medio hacia juego con el color del mostrador de la madera más fina. Nos acercamos.

 
―Buenos días―dijo Jason extrañado ante tal caos.

 
Llegamos al mostrador como pudimos, porque el trafico de personas para aquí para alla de aquel lugar parecía el del supermercado cuando hay descuento. Y para colmo, ibamos con maletas. 

―¿En qué puedo ayudarlos?


―Somos los estudiantes internos. Estamos aquí para ver a Katie.

 
La señora bajita y con el pelo corto rubio asintió luego de dedicarnos una media sonrisa. Pensé que cogería el telfono y le avisaría a la tal Katie de nuestra llegada, pero no. Se volteó hacia un lado y gritó.

 
―¡Katie! Necesito a Katie en el vestibulo ahora.

 
Los tres nos quedamos impactados. Que falta de profesionalismo.

 
En menos de un segundo la voz se corrió por el pasillo ¡Katie! ¡Katie! ¡Necesitamos a Katie en el vestíbulo!

 Hasta que apreció una chica... bueno señora... bueno mujer adulta de unos treinta y tantos años en la cima de la escalera de lino con forma de espiral.

 
Bajo la escaleras tan lentamente que parecía surrealista. A su alrededor la gente corría y gritaba, pero ella se mantuvo muy muy tranquila con el repiqueteo de sus tacones y su flada muy ajustada imponentes hasta que llego hacia nosotros.

 
―Katie estos son los internos―le dijo la señora bajita.

 
―¡Oh No!―exclamó Katie.

 
No puede ser ¡Oh no! ¿Oh No qué? Mi sueño estaba cumpliendose, aunque no exactamente como esperaba pero Oh no definitivamente no suena bien.

 
―!Rebecca!―reagñó a la señora―No tenía ni idea de que llegaban hoy. No estamos listos para recibirlos.

¿Y ahora qué? Jason y yo nos miramos desconcertados. ¿Se acababa todo aqui?

― Como pueden ver este lugar es un desastre. En menos de una hora salimos de tour con Dickie y todavía tenemos que recibir a una boyband.

 
Wow wow wow, no tenía  ni idea de que una Boy Band había firmado con LILa Verse, y mira que sigo el tema en Twitter.

 
¡Katie! ¡Katie! Los chicos han llegado. ¡Katie vamos! La voz se volvió a correr por el pasillo
Por un segundo la serenidad desapareció de la cara de Katie, pero luego pestañeo se aliso la camisa y recupero la compostura.

Que maestría. Necsito ese truco.

 
―Dille a Alysa que la necesito urgentemente―le dijo a Rebecca―Ustedes tres, dejen las maletas aquí y siganme.

 
Jason fue el primero en moverse. Larissa me dedicó una mirada complice y los siguió. Luego lo hice yo, que como me había quedado medio boba tuve que apurar un poco el paso para alcanzarlos.

 
Cruzamos otra vez las puertas giratorias, pero esta vez hacia afuera. Una elegante camioneta negra blindada nos estaba esparando. Una boyband... Que misterio.

Katie se colocó en una postura recta y nos dijo que les mostraramos nuestra mejor sonrisa.
Que emocion. Estaba a punto de concoer a unos famosos. Pero... ¿Quiénes serian?

 
Y las puertas se abrieron y cuatro chicos usando lentes oscuros se bajaron casi que a la misma vez.

  
―Bienvenidos a Lila Verse Records―dijo Katie―Estamos encantados de recibirlos.

 
¡Ay mama mia! Katie nos había pedido nuestra mejor sonrisa, pero la mía era la sonrisa más tonta y genuina del mmundo. Quería gritar, quería alarme los cabellos, quería correr y abrazarlos, quería robarles un beso.

 
Los chicos de la misteriosa Boyband que habían firmado con Lila Verse Records eran ni más ni menos que... Los chicos de CNCO.

Ahora si que me voy a desplomar.


4

No podía, por mucho que quería mantener la compostura no podía. Eran ellos, eran mis idolos, eran... los putos cnco. AAAAAAA

 
Llevo staneandolos desde que tenía 14 años. No me perdí ni un solo episodio de La Banda y me la pasaba votando por los cuatro cada vez que podía. Recuerdo que cuando anunciaron a Zabdiel como quinto miembro le grite al televisor como una loca desquiciada.

 
―Nostros también estamos encantadas de estar aquí―dijo Zabdiel.

 
Ay Zabdilon. Te quiero comer la boca.

 
Derrepente sentí un impulso más grande que cualquiera que hubiera sentido en mi vida. Mi lado fan girl obsesionada quiere salir y abrazarlo. 

¡No! No lo dejes salir Tn―tuve que agarrarme el brazo como una estúpida― no vayas a abrazarlo o perderas todo por lo que has trabajado el ultimo año.

 
―Larissa Ballarta Rodriguez―Gusto en conocerlos chicos―dijo Larissa adelantandose y extendiendoles la mano con descaro.

 ¿Qué está haciendo esta perra? No te atrevas a tocarlos.

Katie se le había quedado mirando horrorizada y por supuesto Jason también. 

Pero bueno, menos mal que la que cometió la locura fue ella y no yo, porque definitivamente no hubiera querido a Katie la persona que se supone que debe evaluarnos mirandome de esa forma.

 
―Ehm Ehm―Katie finjio tozer para que Larissa retrocediera―Disculpela. Estos son los internos, estan aquí para otros asuntos―y dijo mirando a Larissa con a cara más amenazante que había visto nunca.

Sea lo que sea que tuviera planeado para nosotros Ballarta acababa de arruinarlo y tengo la horrible sensación de que Jason y yo seremos los que acabemos pagando por ello.

 
Pero por supuesto, la pelirroja tiene un efecto demasiado grande en los chicos. Note como los ojos de Zabdilon se iban directamente a su escote.

 
¿Por qué zabdi? ¿Por qué? Si yo te quería.

 
―Bienvenidos―dijo otra voz que desconocía―mi nombre es Alysa, estoy aquí para lo que necesiten. Ellos asintieron.

 
―Alysa, puedes ocuparte de los internos, yo me encargare de recibir a nuestros invitados. ¿Está todo listo verdad?

 
―De hecho, no hemos podido encontrar un asistentes para ellos.

 
―¿Qué?―Ddijo Katie sorprendida.

 
¡Oh No! ¡Oh No! Ahora si la habían tomado por sorpresa y la serenidad no pareció volver a su rostro. Para rematar Richard alzó sus lentes oscuros en señal de desaprobación. Casi me da un infarto al verle sus ojitos tan lindos.

 
―!Consigue una ya!―le dijo a Alyssa


―!No puedo, necesito encargarme de Dickie y del staff! Pero puedo tenerlo resuelto en dos semanas.

 
―Bien―dijo Katie volteandose nuevamente hacia los chicos―Lamento este pequeño inconveniente, pero no se preocupen porque ella será su nueva asisitente―y me puso la mano en el hombro.

 
Mis ojos se abrieron como platos y aunque tenía miles de cosas que decir no pude articular palabra.

―Pero acabas de decir que ella es una interna―dijo Erick casi tan impactado como yo.

Ay mama mia. ¿Y ahora que hago? ¿Qué digo? Yo...yo...

― Es solo temporalmente por supuesto―continuó―En dos semanas estaremos de vuelta del tour de Dickie y nos pondremos a trabajar al cien por cien con ustedes. Ahora si son tan amables, Alyssa les dara un pequeño tour por las instalaciones. Y por favor, tengan en mente que estamos cortos de personal y en menos de una hora salimos de gira.

 
Ellos asintieron y tras Katie darrle un apreton de manos a cada uno, los cnco escoltados por Alyssa desaparecieron a través de la puerta giratoria.

 
Apenas me dio tiempo a pestañear porque en cuanto estuvimos solos Katie me acorraló como un leon hambriento acorrala a su presa.

 
―Escuchame bien señorita Fallom―Me dijo con una mirada igual de amenazante que la que le había dedicado a Larissa―Si cometes el más minimo error me asegurare de que no vuelvas aplicar ni para esta ni ninguna otra compañía  !recuerda que tu nota depende de mi!

Trague en seco. nunca me habían amenazado asi en la vida. 

  
―S-s-s-Si señora―fue todo lo que pude decir.

 
―¿Cómo te llamas?

 
―T...N.


―Bien, haré que te envien la lista con todas tus obligacioness y haré que cambien tu reservación de hotel. No me falles TN o acabaré con tu carrera.

 
Pero si mi carrera ni siquiera ha empezado.

 
―No lo haré―le dije con una seguridad que no tengo ni idea de dónde salio, y por suerte pareció calmarla.

 
―Muy bien. Espera en el vestibulo a que te entreguen la lista con tus obligaciones. Ustedes dos pueden ir a sus hoteles, Alyssa se pondrá en contacto con ustedes.

 
Y sin más miramientos Katie se volteó y despareció de allí. 

En aquel momento sentí que podía respirar otra vez. Estaba tan confundida que incluso tuve que dar un paso atrás. Jason me sujeto.


―No es justo―decía Larissa―Yo también quiero ser la asistenta de cuatro chicos que estan buenisimos. Pero bueno, supongo que algunas tienen mejor suerte que otras. ¿Verdad TN?

 
Y Me dirijio una mirada mortal, como sabía que iba a hacerlo.

Diez minutos en Lila verse Records y te has convertido en la asistente de una boyband, te has ganado una enemiga que puede ser de todo menos inofensiva y si te equivocas Katie pondrá fin a tu carrera que ni siquiera ha empezado.

 Grandioso TN, Grandioso


5

-Asegurarse de que esten presentes en la prueba de sonido del Martes
-Asegurarse de que esten en el hotel pasada la media noche
-Responder y gestionar todas sus llamadas, correos y faxes empresariales, etc
-Asegurarse de que no falten a la sesion de fotos del jueves
-Asegurarse de coman bien y se mantengan en formas. PDF con los alimentos prohibidos y el horario del gymansio aquí
-Asegurarse de que no sean grabados o fotografeados en situaciones comprometidas
-No perdelos de vista
-Asegurarse de que asistan a la prueba de vestuario del miercoles de la semana que viene
-Etc.


¡Oh Dios Mio! Cuando me subi a ese avion rumbo a Lila verse Records jamás pensé que acabaría siendo la asistenta de CNCO y todavía no sé si eso es bueno o es malo. Se supone que sería yo la que estuviera recibiendo asesoría en marketing o empresariales no haciendo de niñera de 4 estrellas del pop latino.

 
Y sin embargo estoy aquí en en hotel Solarium, en el ala VIP. 

Mi habitación esta justo en medio. Si, se me informó que a mi izquierda duermen Christopher y Richard y a mi derecha Zabdiel y Erick.

¿Qué se supone que voy a hacer ahora?


Algo vibra en mi bolsillo. Mi telefono.

 
Sé que desconectaste los datos moviles. Llamame, escribeme, dime donde estas, que haces, a quién conociste. ¿No te estas portando demasiado mal verdad? Te Quiero.

 
Buscó por toda la habitación hasta encontrar el cartelito con el pasword del wifi. Lo tecleo lentamente, tan lentamente que no quiero que se conecte.

 
Dejo el telefono sobre la cama mientras me conecto y siento el vibrar de las notificaciones una y otra y otra vez. Por favor que sea twiter, o Imstagram, o incluso Facebook, por favor que no sean de él.

 
Pero eran suyas y posrupuesto lo sabía. 42 mensajes nuevos, como no.


¿Me extrañas?

¿Has concocido a alguien nuevo?

¿Ya te cambiaste de ropa?

 Dime que llevas puesto. 

¿Comiste algo delicioso? 

Recuerda que mis padres quieren que vayamos a cenar a su casa cuando regreses. Creo que deberías comprarte un vestido nuevo, uno más recatado y formal. Les va a encantar.

 Es más, compraré uno que me guste para ti.

 He hablado con tu madre y dice que te extraña mucho. Creo que me preocupo casi tanto por ti como ella.

 ¿Por qué no me escribes? 

Me estoy empezando a preocupar

 Tn esto no es un juego Dime que haces.

Estoy preocupado por ti.

 Tn necesito saber que estas haciendo.

 
Esto es demasiado.

Podría responder. Pero no quiero, quiero un puto día para mi. Asi que, menu, opciones: Silenciar al usuario David.

Que arda el mundo.

 
Es la primera vez que estoy en la zona VIP de un hotel. Asi que no tengo más opcion que aprovecharlo. Pongo mi muscia favorita y me desvisto poco a poco. Preparo la bañera con agua caliente, aceite de rosas, gel de baño y sales relajantes. Si de verdad voy a hacer esto más me vale relajarme un poco porque de seguro que estas dos semanas van a ser un estrés constante.

 
15 Minutos después.

 
El agua aún está caliente y me gusta la manera en la que me abrasa mi piel. Estos han sido los mejores quince minutos de mi vida, solamento yo el agua caliente, la musica, el aroma, la luz tenue y la sensación de relajación. Solamente...


Toc Toc Toc.

 
―¿Quién es?

 
―Servicio de habitaciones voy a entrar.

 
―No no no no!―Grito lo más alto que puedo.

 
Salgo de la bañera rapida como un rayo y me envuelvo en la toalla sin siquiera secarme o ponerme zapatos. 

Cuando abro la puerta del baño los veo ahí, sentados en mi cama. Observandome con atención mientras estoy de pie frente a ellos semi desnuda y chorreando.

¿Qué?

 
―¿Qué...Qué están haciendo aquí?


Christopher me está mirando boquiabierto. Ave Maria que vergüenza.

 
―Nos preguntabamos cuando ibas a molestarnos―dijo Erick―Se supone que no puedes perdernos de vista―Pero realmente el que no me está perdiendo de vista es él.

 
Mierda. Ya he incumplido con la lista. Y...Estoy despedida en mi primer día.

 
―¿No tengo ni siquiera quince minutos libres?

 
―Claro que si―dijo Zabdiel―Cuando nosotros lo decidamos.

 
Que arrogantes por dios. Creí que lo de estrellas de la  musica latina no se les había subido a la cabeza.

 
―Vamos a ver―dijo Richard―pareces buena niña, solo queremos ayudarte.

 
―Gracias―le dije sonriendo. Me pareció sincero.

 
―¿Pueden darme al menos cinco minutos para cambiarme?

 
Al parecer algo de lo que dije les causo gracia, porque no pararon de mirarse entre ellos y sonreir bajito.

 
―¿Te sientes incomoda?―Preguntó Richard. Yo asentí.

 
―Que raro―dijo zabdiel―La mayoría de nuestras fans mataría por ser tú ahora mismo.

 
―Seguramente―le dije―pero no creo que se sintieran comodas usando solamente una toalla.

Y para colmo mal puesta. si no se van rápido se va a caer y me quedaré desnuda.

 
―Si ese es el problema―dijeron los cuatro casi a la vez y en un instante Richard desabotono y se quito su camisa mientras que Zabdiel, Christopher y Erick se deshicieron de sus pulovers.

 
―¿Pero... pero se puede saber qué estan haciendo?


6

Mi rostro era un poema, lo sé, labios boquiabiertos cejas arqueadas y probablemente las mejillas rojas de la vergüenza.

 Yo en toalla, ellos desnudos de cintura para arriba. ¿Qué pensaría Katie si nos viera a ahora? ¿Qué pensaría Larissa? O mucho peor...David.

 
―Fuera de aquí. Largo―les dije y al parecer soy buena comediante porque comenzaron a reirse otra vez y esta vez mucho más fuerte.

 
―Estan completamente locos.

 
―Relax, We are just kidding―dijo Richard, pero a mi no me hizo ninguna gracia.

 
―Nunca habíamos tenido una asistena tan joven y teniamos que hacerte una broma. noobie―dijo Erick con una sonrisa amigable. 

¿En serio creen que esti es gracioso?


―Puedes vestirte tranquila. Estaremos en la habitación de al lado―concluyó Chris.

 
Ellos salieron de allí  sonrientes y yo me deje caer sobre la cama. Que clase de broma estupida era esa. ¿Cómo voy a sobrevivir dos semanas siendo asistenta de esos cuatro graciosos? Estoy perdida y  voy a cagarla... Lo sé.

Fin

 
20 minutos después


Ok. De nada sirve deprimirse ahora. Más me vale ponerme manos a la obra y demostrarme a mi misma y a Katie que puedo con este reto nivel estratosférico.

 
Me levantó, me visto y me recojo el pelo en un moño. La lista decía que no podía perderlos de vista y eso es lo que pienso hacer. Voy a hacer la garrapata pegada a los cnco si hace falta.


Salgo de mi habitación y doy tres pasos hasta que estoy frente a la de ellos. No sé si es la de Christopher o la de Erick y no me importa. Pienso hacer que me respeten. Aunque es dificil ganarse el respeto de cuatro chicos acostumbrados a la fama y que muy importante... son mayores que yo, excepto Erick  que tiene mi edad.

 
Antes de llamar a la puerta tengo un pequeño flashback, recuerdo mis tiempos de secundaria y de cómo solía cantar Tan facil con mis amgas una y otra y otra y otra vez. Recuerdo perfectamente como solía cantar la parte de Richard. Y contigo, solo quiero estar contigo, quiero detener el tiempo... Y pensar que ahora estoy a solo una puerta de estar con ellos. Que loco.

 
Iba a llamar, pero mejor no, mejor les devuelvo un poco de su propia medicina. Abro la puerta de par en par. Ahí están ellos, los cuatro.

 
Erick está acostado sobre la cama con el telefono en la mano. Chris mira por la ventana. Richard esta tambien acostado solo que mirando al techo y Zabdiel acaba de salir del baño.

 
―Escuchchenme bien señoritos de CNCO―No sé porque estoy repitiendo las palabras que Katy me dijo a mi―Me voy a asegurar de cumplir al pie de la letra todo lo que está en esa lista porque no voy a permiiar que ni ustedes ni nadie acaben con mi carrera.... que ni siquiera ha empezado.

 
Los cuatro se me quedaron mirando y sonriendo. Estoy harta de que les haga gracia todo lo que digo.

 
―Que miedo―dijo Chris.

―Asi que te enviaron la lista―dijo Richard―No sirve de nada, la puedes tirar a la basura. 

¿Qué? ¿Por qué? Además tecnicamente no puedo aunque quisiera. la tengo en mi movil y ni porque me lo pidan ellos voy a tirar mi movil a la basura.

 
―Mira―me dijo Erick―trabajemos juntos. Nosotros necesitamos causar una buena impresión, tú tambien.

 
―Nosotros nos vamos a portar bien―continuó Richard―no te preocupes. Y de hecho te vamos a dar algunos tips a cambio de que cumplas algunos de nuestros caprichos.

 
―¿Caprichos?

 
―Poco a poco te iras dando cuenta―dijo Zabdiel―Y si me disculpas, por si se te olvidó que estamos en un hotel a mi no. Me voy a la piscina.

 
Me mire a mi misma en el espejo. Pantalones corte recto y blusa de mangas largas. Estaba preparada para unas tutorías y para hacer de becaria. No para vacacionar en el hotel.

 
―Nos vemos luego Tn

 
―No les dije mi...

 
―Lo sabemos me dijo Richard poniendome una mano en el hombro y acariciandolo poco. 

Ellos salieron. y yo debía de asegurarme de seguilos. Aunque  no sin antes cambiarme de ropa claro.


7

El sol brillaba radiante, pero no tan radiante como los chicos de cnco. Podía notar como todas las huespedes del hotel se los comían con la vista. ¿Y sinceramente quién no?

 Y pensar que estan bajo mi cuidado... todavía no estoy muy segura de si esto es un sueño o una pesadilla. 

―Ayo Chris say Hi to the Cncowners―dijo Richard mientras que grababa una historia para Instagram desde su telefono ridiculamente caro. 

Lo más curioso es que sé el precio porque David tiene uno exactamente igual. 

―Hola chicas las queremos mucho. espero que esten bien. un beso muy grande. Muaaa

Me quede embobada mirandolos y sonriendo. pense en mi misma, la cantidad de veces que estuve tras de la pantalla y me hacían sonreir con este tipo de cosas. 

Estos dos estan controlados, Erick está deleitando a las chicas con un show de natación asi que también lo tengo controlado. Y Zabdiel... Zabdiel... ¿Dónde está Zabdiel? 

Oh dios mio. Lo busco por todos lados. ¿Dónde se metio ese hijo de su...? No está con sus amigos, no está en la piscina, no está en el bar, no está en las duchas. como unico que hubiera ido al baño pero creo que me daría cuenta. 

Estoy de los nervios. no los puedo perder. !No, no no! al menos no en el primer día. 

me pongo de pie y doy un paso, pero estpy tan nerviosa que realmente lo que doy es un traspies. mis bonitas sandalia de tacon se enredaron con la tela suave de mi pantalon largo color azul (fue lo más veraniego que encontreé y aun asi creo que es demasiado formal). Me voy a comer el piso, lo sé. 

Pero no. por suerte unas manos frías que me agarron de la cintura con fuerza evitaron mi caida. Uff... menos mal. 

―De nada―dijo Zabdiel muy cerca de mi oido, pude hasta sentir su aliento. y porspuesto me puso la piel de gallina. 

―Gracias―le dije y trate de recomponerme―¿Dónde estabas? 

―Buscandote

―No me he movido de aqui 

―¿En veldad? no me había dado cuenta―Y se rie. 

¿A qué juegan estos chicos? 

―¿Qué quieres?―pregunté

―Solo alguien que me ponga bloqueador. ¿Te apuntas? 

Mis ojos se abrieron como platos y no pude evitar mostrar una sonrisa pervertida. ¿Qué quiere que yo le haga qué? 

―¿Por qué quieres que yo...

Ni siquiera me dio tiempo a terminar. en menos de segundos se saco el pulover por la cabeza y me deleito con su abdomen desnudo. 

Oh... Dios... mio. No recuerdo cuando fue la ultima vez que mire a un chico con estos ojos, incluido David. Y para colmo él es mucho más alto que yo, por lo que me siento una hormiguita arrinconada. 

―Si se lo pido a cualquier otra chica puede malinterpretarlo y no se lo voy a pedir a otros hombres. creo que tú eres la mejor opcion. 

Ah, conque era por eso. 

Bueno. Me encojo de hombros. realmente no sé si esto es uno de sus capricos de los que me hablaban o si es que forma parte de mi nuevo trabajo del que tengo absolutamente cero idea. 

Me pasa el bloqueador y se sienta en mi silla mientras me mira con cara de ganador. Debe de estar gozando con mi ingenuidad, yo estoy aquí toda nerviosa cuando de seguro soy la chica numero quinientos que le pone bloqueador.

Anyway...

Me embadurno las manos con la crema y luego la coloco sobre su espalda. su piel es blanquisima y huele muy bien, puedo sentir sus musculos, puedo ver sus pocas pecas. Resulto no ser tan incomodo como creía y el parece disfutarlo por los gemidos callados que está soltando. 

Mama mia, que situación. 

―Hazlo sin miedo, no muerdo―me dijo. 

Y aprovechando mi confusión puso sus manos sobre las mías y me hizo recorrerle el abdomen de arriba a abajo. lentamente, estuve en contacto con su piel caliente. Mis manos viajaron a traves de toda esa zona y masajearon su abdomen y pecho completamente afeitados. 

Por un momneto me olvide de todo. y solo disfrute de la picardía de aquel momento. estaba cumpliendo el sueño de toda fan girl. estaba toqueteando a uno de los cnco a mi antojo. si me ve una cncowner bien loca me mata. Tn, que lejos has llegado en la vida. 

―Ven conmigo―dijo y me tomó de la mano. 

Automaticamente me puse roja. ¿Qué está haciendo? ¿A dónde vamos? ¿Y por qué sonrie con picardía? ¿Será que malinterpretó lo que acaba de pasar? A decir la verdad estaba gimiendo mucho. 

Pero no, solo dimos unos pocos pasos hasta encontrarnos con Christpopher y Richard. 

―Si quieres vigilarnos bien tienes que estar con nostros―me dijo y sujetandome por los hombros me sento sobre uno de los sillones de playa.

―Gracias por la ayuda preciosa―guiñó el ojo y despidiendose con la mano se volteó y dirigio hacia la piscina. 

―Espera que hago con....―le estaba diciendo pero se dejo caer al agua. 

Oh Oh. Estoy aqui, despues de haber toqueteado el cuerpo de Zabdiel de Jesus de arriba abajo, con la sensación de su piel aún en mis manos y para rematar sentada junto a Christopher y Richard. Tragame tierra. 

―Yo puedo ayudarte―me dijo el moreno con una voz simplemente seductora. Desde cuando tiene esa voz. Oseré yo que me estoy volviendo loca. 

―En realidad yo no...

―No tengas pena―me interrumpió―Zabdiel se está pasando de gracioso no lo tomes en cuenta. Ven. 

Y sin darme tiempo a decir nada se llenó las manos de crema. 

Oh no no. ¿Qué le digo? Que no tenía intención de ponerme protector y fue todo una confusión o dejo que sus manos jugueteen por mi cuerpo como lo hicieron las de mías por el de Zabdiel. 

―Turn around

OMG Its happening. Me volteo y me dejo hacer. sé que esto está mal, muy mal. Tengo un novio, uno al que quiero dejar pero que sigue siendo novio y un trabajo nuevo que si cometo el más mínimo error puede echar abajo mi futura carrera. 

Pero no puedo decirle que no. no por todas las noches quee me las pase cantando su parte en tan facil. 

Sus dedos frios entran en contacto con mi piel y doy un pequeño salto. 

―Tranquila―me dice―Relaja. 

Y luego aprieta la zona entre la cabeza y el hombro y logra que me relaje como no lo había hecho nunca en mi vida. ni siquiera en el baño. 

Wow, eres bueno en esto. quiero decirle, pero que va, tengo miedo de que lo arruine. 

―Tienes una piel tan suave, tan facil de acariciar. 

Escucho lo que está diciendo pero no lo tengo en cuenta, solo me dejo hacer. sus manos firmes masajean y aprietan mi espalda. Esto más que bloqueador parece un masaje chino. 

Me acarica, me aprieta, me clava los dedos y luego recorre mi piel suave con solo la punta del meñique. Me está volviendo loca y espero que no lo sepa. estoy empezando a sentir mariposas en el estomago a medida que sus manos se aventuran más alla, van bajando por la espalda casi intentando rozar mis pechos. Su tacto es una delicia. 

Espera espera espera un momento. ¿Qué? 

Gracias a dios tuve un peuqeño instante de realidad dentro de la burbuja donde Camacho me había encerrado. 

―¿Qué estás haciendo?―Me aparté en un brinco y le dije roja de la verguenza. 

ÉL solo me miraba

―¿En serio qué estás haciendo? ¿Qué les pasa? 

Me estuvo sosteniendo la mirada por unos segundos, pero luego se fue rompiendo poco a poco. No aguanto más. El muy hijo de su madre tuvo que echarse a reir. 

Su risa se escuchaba cada vez más fuerte, y desgraciadamente no era la unica. Zabdiel, Chris y Erick estaban escondidos espiandonos detráss de una palmera y ahora también habían estallado a carcajadas. 

Me sentía humillada, pequeña y completamente ridiculizada. No sabía que podían ser tan malas personas. 

―Disculpanos de verdad―dijo Richard―es solo una broma. 

―En verdad solo queremos ponerte a prueba―comentó zabdiel mientras se acercaba. 

―Increiblemente paraste a tiempo―dijo Chris―la maoría cae rendida en la primera prueba 

¿Prueba de qué? 

Estoy que ardo... y no precisamente porque el sol me este quemando la piel. No sé que se pensaron estos cuatro idiotas pero siento que están jugando conmigo y no me gusta para nada. Nadie, nadie juega conmigo por muy famoso y guapo que seas. 

―¿Se divierten? Muy gracioso. ¿Desde cuando empezaron a jugar con las chicas de esa forma

―Desde...―estaba diciendo Erick pero lo interrumpí. 

―Ni siquiera contestes. sé la respuesta. Desde que su vida se volvió demasiado montona y aburrida porque tenian a la mano todo lo que querían y ahora son solo unos idiotas desalmados que tienen que recurrir a esta payasada porque sus vidas están vacías. 

Si. Lo había soltado. Todo lo que nunca le debes decir a un artista lo había soltado, de golpe... y en el primer día. 

―Para bien o para mal ahora soy su asistente. Asi que van a hacer lo que yo les diga. y les digo que se acabo la piscina por hoy. !Vuelvan a sus habitaciones ahora mismo! 

―¿Estás hablando en serio?―preguntó Zabdiel desconcertado.

―Completamente―les dije. !Arriba, ahora! 

―Si no colaboras―añadio erick―podemos hacerte perder tu carrera. 

―Prefiero perder la carrera antes que la dignidad―les dije―Y que les quede bien claro―los repase a todos con la mirada, especialmente a Richard por el numerito del protctorr― Que no voy a caer en su patetico jueguito. 

Ahora si me quede completamente vacía. Toda mi valentía se fue, y esperaba que ellos no se dieran cuenta y por favor acataran mis ordenes. Porque no, no estoy dispuesta a perder mi carrera por nada en el mundo. 

Christopher se encogió de hombros primero, luego hcieron los demas y silencicios y acongojados se marcharon mientras yo permanecia erguida. 

Fiu, me dije a mi misma. Al menos pude hacer que me respetaran. 

Sin embargo, hay algo que no me queda claro... ¿A qué se referia cuando dijo que la myoría cae rendida en la primera prueba? ¿De qué pruebas estaba hablando? 


8

...

Necesito hablar contigo TN. 

No se a que estas jugando Fallon pero no es divertido, me preocupo por ti.

 Llamame en cuanto veas esto. Estoy preocupaisismo. 

dime si comiste algo

. dime como te fue.

 dime si me extrñas. 

Necesito saber si me extrañas. 

No me gusta estar incomunicados. si no respondes pronto tomaré un avion e iré a verte... 

Hola David

Lo siento por no respezonderte en todo el día estuve realmente ocupada. 

Estaba muy preocupado. 

No te vuelvas a desaoarecer asi o habrá consecuencias

No puedo prometerte eso, de verdad estoy muy ocupada

Y yo estoy preocupado por ti. 

Soyy tu novio por lo tanto merezco saber donde estas 

¿Qué? ¿De qué está hablando? Conozco a David. sé que es un controlador de mierda pero hoy se está pasando de  la raya. Cada vez me queda más claro lo que tengo que hacer en cuento vuelva a casa: Ponerlo en su lugar, dejarlo. decirle que se olvide de mi para siempre. 

Me estas dejando como un ridiculo

Te extraño, te necesito

Eres mia Tn, no lo olvides.

Eres lo más valioso que tengo. Mis padres te adoran y yo tambien. 

Ya te he comprado el vestido, te encantará. también te he comprado algo especial. no puedo esperar a verte con eso

Tengo que irme mi jefa me necesita 

No 

Espera

TN Fallon no te atrevas a irte

Soy tu novio

no me puedes hacer esto

no me puedes dejar con esta procupación 

Vuelve antes de que... 


Está loco. David está completamente loco. 

La culpa es totalmente mía por alimentar su sed de tener el control. Me acostumbre tanto a vivir bajo su sombra que acabe haciendole daño. Lo entiendo. pero aun asi me da igual. tengo que liberarme cuanto antes. es la primera cosa que debo hacer cuando llegue a casa. 

El reloj digital narca en rojo las nueve y cuarto. Estoy duchada y desnuda sobre la cama, me daba demasiada pereza ponerme ropa, además... por algun motivo sineto que si me visto la sensación que me dejaron las caricias de Richard sobre mi piel desapareceran. 

todavía puedo sentir sus dedos, y sus manos y con solo el hecho de imaginarmelo puedo comenzar a sentir cosquillas. 

Que rara es esta sensación, es la primera vez que la estoy experimentando. Mis manos recorriendo a Zabdiel y luego Ruchard estrujandome con fuerza para luego rozarme con las punta de los dedos es demasiado para mi. Voy a... 

Toc Toc Toc. Servicio de habitaciones. 

―En un minuto―contesto. 

Me levanto y me envuelvo en la bata de baño. espero que esta vez si sea el servicio de verdad. 

―Adelante 

Y no, son ellos. otra vez, en mi habitacion. esta vez vienen glamurosos. vestidos de fiesta y a la última moda con colores super llamativos. 

―¿Dónde es la fiesta?―pregunté―¿Saben que no van a ir verdad? 

―Escucha TN―comenzó a decir Erick―nos equivocamos contigo. Lo sentimos. Por favor no te pases de dura con nosotros. 

Le mire de arriba abajo. Me había pillado. No tenía ni la más minima intención de ser dura con ellos hasta que empezaron a querer jugar conmigo y tocarme los senos. 

―We were wrong―dijo Richard―Te pedimos disculpas. No teniamos que haber jugado contigo. A partir de ahora solo te veremos como nuestra asistente. 

Alce las cejas intrigada y mire a Zabdiel.  Asintió. también Christopher. 

―Bien―dije al fin poniendome las manos en la cintura―Pero es la unica que les voy a dejar pasar. 

Ellos sonrieron y yo con ellos. ¿Acababamos de firmar un pacto de amistad? 

―La fiesta es aqui mismo. y tu vas a venir con nosotros. Te hace falta relajarte

―Yo no... 

―Si tú si―dijo Richard― And we are not taking a no for answer.

―Bueno... creo que podría venirme bien. Denme unos minutos para cambiarme 

―Por eso trajimos esto―dijo Chris y me mostraron un vestido negro de brillos con la espalda abierta. 

―Wow―se me escapó―Es precioso. 

Y seguramente carisimo. venía con etiqueta asi que estoy completamente segura de que es nuevo. Es precioso, es perfecto. Es todo con lo que una chica apasionada por la moda podría soñar. 

―No te procupes, es tu talla―dijo Erick 

―Como saben cual es mi... 

―Nos fijamos en todo―dijo Richard y me guiñó el ojo. Yo sonreí. 

―Muchisimas gracias chicos 

De nada, respondieron todos a la par y yo me quede mirandolos en silencio. Ellos también me estaban mirando a mi. Parece que no habían captado el mensaje 

―¿Quieren que me cambie delante de ustedes o que? 

―AAA

Y entonces fue que se dieron cuenta. que lentos son

―La verdad a mi no me importaría―dijo Chris―¿y a ti Erick? 

Los cinco reimos como si fueramos amigos de toda la vida mientras yo los echaba de mi habitación. 

Fuck u david, Fuck u Larissa. esta noche será solo mía y planeo divertirme con mis nuevos amigos. 


9

Hasta ahora nunca hbaía estado en una fiesta de hotel y me arrepiento de haberme perdido semejante diversión. El ambiente era el más increible que había visto nunca. Las luces de discoteca, la barra libre, las modelos y las gogos, los bailarines, la musica a todo volumen y el tubo para aquellos que desearann deleitar a los demas con sus sensuales movimientos. 

Esta sería mi noche. Podía sentirlo. Mi vida estaba a unto de dar un cambio radical. 

Una de mis cacnones favoritas empezó a sonar y sin pensarmelo dos veces me lance a la pista, sola, liibre, disfrutando de mi misma y de mi tranquilidad. También aproveche para ir a la barra y beberme tres shots de tequila y limon. lo suficiente para entrar en calor y para que pudiera disfrutar incluso más. 

En pocos minutos mi mente había dejado de preocuparse por trivialidades y mi cuerpo comenzó a sentirse magico. Estaba flotando sobre la pista, estaba bailando más suelta que nunca. Estaba siendo genuinamente feliz y dueña de mi misma. 

―Te invito a un baile princesa―dijo Richard. 

Y me tomo de la mano y me envolvió contra su cuerpo. Yo me deje ir. estaba ida si, pero no lo sufcicente como para no estar alerta. Ademáss, sus movimientos eran inofensivos y amigables. Justo lo que yo necesitaba esta noche. 

Mis caderas comenzaron a moverse, él me agarró con ambas manos y coreaba E E E. miientras al ritmo de la musica bajabamos al suelo. 

―Eres buena bailando eh 

―Ni siquiera yo lo sabía―le dije mientras le agarre del cuello y le susurre al odio que era un cabron por lo que me había hecho en la tarde. Comenzó a reirse a carcajadas. Mi borrachera estaba empezando a notarse. 

En eso llegaron Christopher, Erick y Zabdiel. Nos apartamos. 

―Tn, si nos disculpas un momento tenemos un asunto importante que resolver, ¿verdad Richard? 

―Right―dijo Richard―volveremos en un segundo 

―Ni lo piensen―les dije―no voy a perderlos de vista. 

―Es cuestion de vida o muerte―dijo Chris muy serio―  confía en nosotros por favor. 

Los mire soniriente e incredula, ppero ellos estaban muy serios. Al parecer no era una broma.. Nunca se identificar cuando se trata de una broma.

Esto me sorprende.  En primera, mientras bailaba con Richard perdi por completo a los demás. Cosa que está mal, muy mal. Esto de cuidar a cuatro es mucho más dificil de lo que cualquiera se pueda imaginar y ahora resulta que tienen que atender un asunto de vida o muerte en medio de... una fiesta. 

―Por favor―dijo Erick mirandome fijamente―Es importante.

Sin duda alguna esto era lo más serios que los había visto desde la mñana en Lila Verse. No tengo ni idea de lo que está pasando pero me sentiría mal si fuera algo significante y yo los estuviera deteniendo. 

―Está bien, está bien―les dije―Vayan, pero solo un segundo. 

―Gracias hermosa―dijo Chris mientras me ponía un shot en la mano y Zabdiel antes de marcharse me guiño el ojo. 

Se marcharon, y me quede sola. pero no estaba para nada triste por ello. Al contrario. la noche acababa de empezar. 

Despues de beberme ese shot y otros dos más si que sentí que podía volar. No sé en que momento paso pero me había metido a bailar en medio de una multitud que me vitoreaba a mi y a la otra chica que estaba sujetando mi cintura. 

Todos los demás nos miraban y de vez en cuando hacían una pequeña entrada y demostraban sus mejores pasos. Parecía que me había metido en una fiesta de esas de video musical. Definitivamente estaba siendo uno de los dias más incribles de mi vida hasta que. 

Algo vibra en mi bolsillo. mi telefono 

imposible, no puede ser David. lo tengo silenciado. 

Hola TN Fallon. Es Katie de Lila Verse, solo pasaba a checkear a los cnco. espero que esten dormidos ya. ¿No es asi? 

Mierda mierda mierda. mire la hora, eran las doce y media. 

Mierda, mierda mierda. ahora que hago. 

Manten la calma, respira Tn, tú puedes con esto. 

Si, se acotaron hace un rato. Por ahora todo marcha bien. Lo tengo controlado. 

Y....enviar.

Dios mio, tremenda mentira que acabo de soltar. ¿Dónde se metieron? Si es que yo los mato.

 Llevan desaparecidos más de dos horas y lo peor es que no me di ni cuenta. Cuando los encuentre va a haber un funeral triple. al otro lo dejare vivo para tenga que cargar con ese peso y se vuelva loco lentamente.. 

Salgo de allí a todo motor y me dispongo a buscarlos por todo el maldito hotel. No están en su habitación, no están en la mía, no están en la piscina, no están en el vestibulo, no están en los baños. ¿Donde se pueden haber metido cuatro chicos? 

Salgo a la parte trasera casi a punto de llorar.

 Si se escaparon estoy perdida. Si alguien los graba y los sube a internet estoy perdida. Si alguno de ellos publica una historia estoy perdida. De alguna forma u otra acabare perdiendo mi futuro. Los odio, los odio con todo mi corazón. 

Ah, Ah, mmmm aaaah 

¿Estoy loca o es que estoy oyendo gemidos? 

Vienen del cuarto de limpieza. y mientras mas me acerco más claro los escucho. Alguien está teniendo la mejor noche de su vida porque no para de gemir. 

―Más más más por favor más quiero más. 

Me pongo roja de la verguenza. ¿En qué momento llegue a esto? A escuchar detráss de una puerta como otra esta conseguiendo algo que yo hace meses que no tengo. 

Es importante recalcar que porque no quiero. no quiero que david me toque desde hace muchisimo tiempo. Esa ha sido una lucha constante, y por suerte he resultado ganadora, aunque no descarto la posibilidad de que probablemente lo este haciendo con alguien más. 

Derrepente silencio. ¿Pero Qué ha pasado? Se supone que deberían darle más ¿Ya? ¿Quién termina tan rápido? y en la mejor parte ¿Quién habrá sido ese idiota que seguro la dejo con ganas? Dios mío, de verdad que los hombres son unos.... 

La puerta se abre y me empuja bruscamente hacia el otro lado. Caigo al suelo como toda una estupida (chismosa) y veo a una chica rubia con un vestido rosa ajustado a medio abotonar salir corriendo y llorando al grito de !No es justo! 

WTF, eso fue una sorpresa. 

Pero sorpresa y todo no se compara para nada con la sorpesa que me lleve cuando los vi del otro lado, a los cuatro, todos con los panatalones desabrochados y Zabdiel en boxer. 

―¿Fallon?―dijo Richard que fue el primero en verme.

―¿Qué haces aqui?―preguntó Erick. 

―Usted....ust... 

Intente ponerme de pie como pude, pero los shots que me habia tomado decidieron traicionarme y termine cayendo pateticamente al suelo... again. 

―Estás borracha―dijo Zabdiel. 

―Y ustedes a punto de que los mate. Pero no sin antes explicarme que acaba de pasar aqui


10

Richard me llevaba en brazos durante de todo el camino a su habitación en el que estaba siendo el silencio más pesado del mundo. 

La combinación de los tragos, las lámparas de lujo, las paredes rojo vino, el olor a sexo y la vergüenza en sus caras y en la mía no resultaba otra cosa que extremadamente incomoda. 

Una vez llegamos, me deje caer con ayuda de Rich sobre la cama. Tenía que propiciarles una buena regañina, el susto que me hicieron pasar es de los más grandes de mi vida. Sin si quiera contar con que me arruinaron completamente la que estaba siendo la mejor noche de mi vida. 

Ellos se turnaron para ir al baño y yo aproveche ese tiempo para calmar mi respiración e intentar relajarme. Si la habitación no paraba de dar vueltas no iba a estar preparada para lo que está por pasar. 

Una vez todos se ducharon supe que era mi turno de hacer de niñera o como lo llaman los profesionales: asistente. 

Richard estaba sentado en una silla blanca con los brazos cruzados, Christopher tumbado sobre la cama mirando al cielo, Zabdiel acabado de salir de la ducha y Erick mirando por la ventana con rostro pensativo. 

Me erguí lo más que pude y cruce una pierna por encima de la otra. Era importante que me viera esbelta y poderosa, aunque mi pelo, el poco maquillaje que me quedaba y mi cara demostraban que me había pasado un camión por encima. Pero bueno... erguida y esbelta. 

―¿Quién va a comenzar?―pregunté. 

Todos me miraron, con el rostro avergonzado y muy serio. Y entonces comprendí que era mi turno para hablar. 

―No puedes desparecer por tanto tiempo. !¿Están locos o qué?! Katie llamó y tuve que mentirle. Les recuerdo que todo mi futuro esta en juego. Yo confié en ustedes y todo para qué. para que pudieran estar revolcándose lo que sea que fuera eso con esa rubia. 

Zabdiel tuvo que reír. No entiendo a que viene esa risa. Estoy aquí gritando, soltándoles un buen regaño y el decide que reír está bien. 

―¿Te parece gracioso? 

―No nos estábamos revolcando. 

Ay por favor. 

―Whatever... I don't care. a partir de mañana las cosas van a ser distintas no voy a permitir que... 

Algo vibra en mi bolsillo. Mi teléfono 

Mierda. Que momento. Además quien llama a esta hora de la madrugada. No puede ser David porque lo tengo silenciado. 

Es... ¿Mi madre? 

OMG, se me olvidó llamarle para contarle que llegue bien. Pero con un día tan ajetreado como el de hoy apenas tuve tiempo para pensar en otra cosa que no fueran ellos. 

―No se muevan―les dije―tengo que cogerlo. 

―Hola Mamá 

―Tn gracias al cielo estaba muy preocupada por ti. no respondías mis llamadas y David dice que no respondes sus mensajes. ¿Qué te esta pasando? eres una Falllom. no te educamos para que fueras así. 

―El día de hoy fue muy estresado mamá. solo estaba divirtiéndome. 

―Debes buscar el modo de compaginar responsabilidad y diversión. te lo he dicho muchas veces. Llama a David urgentemente, dile que estás bien. El pobre está como loco. Nos llamó hecho un mar de lagrimas. No hagas sufrir al muchacho Tn, sabes lo importante que es estar con él. 

―David me vuelve loca. me estoy tomando un descanso. Solo eso. 

―!No! eres boba o que. no puedes tomarte descansos con David. él es lo mejor que nos ha pasado y tienes que actuar en consecuencia. quiero que lo llames y ahora mismo y... 

―Pero mamá

―Sin peros. llámale ahora mismo, dale una buena excusa y ni se te ocurra decirle que lo estás evitando. Sé buena y dócil. Se la novia perfecta y procura que David no vuelva a despertarme otra vez en la madrugada llorando porque tú no respondes sus llamadas. 

―Mamá yo no.... 

Too late, ya había colgado. No lo pude evitar. mis puños se cerraron y comencé a apretarlos con mucha fuerza. 

―¿Quién es David?―preguntó Chris. 

Lo mire y no se porque pero no pude contenerlo más. comencé a llorar como una niña pequeña. 

¿Por qué? ¿Por qué? Sabía que esto de no contestarle sus mensajes me explotaría en la cara, pero no de esta forma. Que sucio juega "mi novio" tuvo que llamar a mi madre, la única persona que sabe que puede romperme en mis pedazos. Lo odio, lo odio, lo odio con todas mis fuerzas. 

―Hey hermosa estás bien, ¿Qué pasa?―dijo Chris que rápidamente se acercó y me abrazó. 

No pude resistirlo. No podía parar. quería decirle que estoy atrapada en el mundo de David. Quería decirle que solo soy el accesorio favorito de mi novio y que mi madre me obliga a serlo solo porque tiene mucho dinero. 

―Hey Fallon no llores―añadió Richard y me abrazó desde atrás para luego acariciarme el pelo. 

―Everything its gonna be ok. ¿Right? 

Asentí aún con los ojos llenos de lagrimas. No sabe cuanto se lo agradezco. Hace mucho que no daba un abrazo sincero y ese me parecía uno. 

Aunque era un poco surrealista. estaba abrazando a mis dos ídolos de la adolescencia a solo pocos minutos de odiarlos con todo mi corazón. 

―Quiero―les dije―Quiero olvidarme de todo. Volvamos abajo. Volvamos a la fiesta.

Si, necesitaba volver a estar como antes. Quiero volver a ser feliz. Quiero volver a ese estado. necesito eso, necesito volar. Necesito estar borracha. Necesito alcohol

―Pero ya tomamos una ducha―dijo Zabdiel remarcando el hecho de que estaba sin camisa y en pantalones de pijama. 

Por favor, ni siquiera había tenido en cuenta lo sexy que se veía. 

―No pasa nada, iré yo sola―dije y me voltee para marcharme. 

―No―Christopher me sujeto del brazo―No vas a volver ahí sola. 

―!No soy una niña!―le grité― y sé que está mal gritarle. él no tiene la culpa de nada. 

―Ya antes me dejaron sola. Y además... además...

Oh shit, here we go again. No pude frenar mis lagrimas. no pude frenar lo triste que me siento. 

Comence a llorar otra vez. Pero esta como si fuera un bebe de tres meses. Deje fluir mi llanto y ellos, los cuatro, me abrazaron con la ternura con que acaricias a un perrito. 

―Quiero... necesito estar borracha―les dije en un suspiro. 

Christopher asintió y se apartó de mi un poco para llamar al servicio de habitaciones. 

―Tres botella de champan y una de whisky por favor. Si, a la habitación Doscientos Seis. 


11

El servicio de habitaciones llegó. y luego tuvo que venir otra vez porque las tres botellas de champan y el hielo se acabaron en un santiamen. 

Yo me había bebido la mayor parte. pero ellos tampoco  se quedaban detrás. Al parecer se habían quedado bastante frustrados por el misterioso incidente de la rubia del cuarto de conserje. 

Todavía sigo intrigada y con ganas de saber qué pasó. 

En este rato de amigos borrachos habíamos llorado, reído y ellos incluso cantado. Los había visto en videos muchas veces pero me sorprendió la manera en la que armonizaban tan bien en la vida real. Definitivamente son la mejor boy band latina. 

―You know man thats what we love to do. 

Reí. la imagen que estabamos dando ahora era digna de toda una pelcula de Hollywood. Christopher y Zabdiel sentados en el sofá blanco de lino mientras que Erick y richard estaban en el suelo colocados a mi derecha y a mi izquierda respectiivamente. Ello,s la mayoría semidesnudos y yo con un vestido negro impactante, descalza y con el maquillaje corrido. Amazing. 

―Gracias por hacer esto por mi chicos―Les dije mientras sonreía como una boba. 

Hasta ahora tenía con ellos una relación amor odio, pero en este preciso instante se inclinaba hacia el lado del amor. 

―Don't say thank u, this isnt for free―dijo Christopher y me dió la mano. 

Me puse de pie con mucha dificultad aun cuando me estaba ayudando. Dos botellas de champán si que eran suficientes. Todo me daba vueltas. me sentía como si estuviera encima de una patineta encima de una tabla de surf encima de una rueda de la fortuna. 

―¿A qué te refieres? 

―Querías que te ayudaramos a sentirte libre verdad―me dijo y se puso de pie. 

―Si pero... 

―Shhhh―me dijo y colocó el dedo indice sobre mis labios. 

¿Qué está haciendo? 

Me quede ahí quieta, sin decir ni una palabra y no porque fuera boba. Sino porque quería. Quería saber que tenía para ofrecerme. Quería sentir la sensación de esta tarde. Quería que jugaran conmigo, y demostrar que yo podía jugar con ellos de la misma forma. 

Chris comenzó a acariciarme el labio suavemente mientras sonreíaa pervertido.

Me estaba esforzando por permanecer neutral e inocente. No quería que se dieran cuenta de que esta vez yo lo estaba buscando. 

Entonces Richard se puso de pie y me acarició el hombro con cuidado y lentamente comenzó a deslizar abajo la manga de mi vestido. 

Se me puso automaticamente la piel de gallina. Yo seguía sosteniendole la vista a Chris. Él seguía con su sonrisa perversa. 

Richard no se tardó más y comenzó a mordisiquierame el hombro y luego el cuello. Senti un escalofrío recorrer todo mi cuerpo especialmente en el centro. Estaba  a punto de caer en lo que les había dejado bien claro esta mañana que no iba a pasar. 

Desvie la mirada y mis ojos se encontraron con los de Zabdiel. el seguía sentado en el sofá, con las piernas abiertas y sonreía, como todo un ganador. Si se supone que yo era el premio ya se lo habían ganado. 

Chris me atrajo lentamente hacia él acercando cada ves más su boca a la mia y cuando estuvieron a pocos millimetros mordisqueo mis labios con suavidad.  Deje hacer que sus labios me probaran, pero él se mantenía cauteloso y ho quería mas. Esta lenta tortura estaba matandome.

Asi que me arme de valor y lo bese. L bese yo con todas las ganas que tenía de besar a alguien de verdad no por obligacion, sino solo porque me gustaba.

Su lengua se enredó con la mia y sus manos bajaron y buscaron mi cintura. Si, si, si. Asi2. Eso es excatamente lo que quiero. 

―No corras―dijo Zabdiel que derrepente había aparecido detráss de mi y me jaló el pelo con fuerzas― O habrá consecuencias. 

Sonreí, podía hacerse el gracioso, podía hacerse el chulito. Yo estaba tan borracha que ni siquiera lo sentía.

Me aventuré a besar a Richard, pero ya no quería un simple beso, quería más. Mucho más. Me había vuelto insaciable.

Me agarre de su cuello e hice que me cargara.  Me agarró del trasero con fuerza y respondió a mi beso con la misma intensidad. 

―¿Estás lista para lo que sigue? 

Me pregunto Zabdiel que habia comenzado a acariciarme el pelo.

-Si quieres parar este es el momento. 

―Quiero seguir―les dije. Muestrenme todo lo que tienen. 

Los tres rieron. Me miraron divertidos y entre los tres me cargaron y acostaron boca arriba sobre la cama como si fuera un trofeo. 

Cuando en realidad el trofeo son ellos.

Zabdiel me acariciaba los brazos y Christopher las piernas. Sus manos subían y bajaban por mi cuerpo a conveniencia propia y yo me dejaba hacier mientras sonreia plentamente. 

Poco a poco mi ropa comenzó a desaprecer. Mi vestido bajo lentamente por todo mi cuerpo dejando a la vista mi ropa interior negra de ecnaje. Cuando me vieron Richard y Christopher no  pudieron evitar morderse el labio. Ese instante, ese pequeño instante de mi vida fue pura felicidad. 

Siguieron acariciandome, tocandome, mimandome, rozandome y yo me arqueba como todo una loca al contacto de sus suaves caricias. 

Mmm

Richard tomó mis manos y con cuidado las colocó por encima de mi cabeza para luego amarralas con el cordel de su pantalon de pijama blanco. 

Nunca había visto a nadie tan sexy cuando se está vestido solo con un pijama. Las cosas de estar tan bueno. 

Christopher tomo uno de mis pies e hizo exactamente lo mismo. Me lo ató a una de las esquinas de la cama. Igualmente hizo Zabiel con el otro. 

Asi que les gusta este jueguito... 

―¿Qué...qué van a hacer?―pregunto haciendome la incoente y poniendo carita de niña buena.

 Quiero que piensen que tienen el control. No quiero que descubran que yo necesito más esto que ellos. 

―Fallon―dijo Zabdiel―Bienvenida a nuestro juego.

¿Juego?

― Ya hablaremos de las recompensas luego. Lo unico que debes saber ahora es que tienes tres oportunidades para pedir más. Si las gastas todas el juego habrá acabado. 

¿Juego? ¿Oportunidades? ¿Pedir más? ¿Acaso la chica que pedía mas perdió? ¿Recompenssas? ¿De qué estan hablando? 

Pero por qué me cuentan todo esto mientras estoy atada en una cama en ropa interior y con las piernas abiertas. 

―Hoy solo vamos a darte una pequeña prueba―dijo Christopher―Tú decidirás si juegas o no.

―¿Qué rayos estás hablando? Yo no... 

Mierda, había perdido todo el control que creía que tenía. Mierda, no era un buen momento. No cuando estaba atada de pies y brazos.

―Erick―dijo Richard ignorando mis palabras―Es toda tuya. 

Y casi a la vez los tres se apartaron de mi campo de vision para que pudiera ver a Erick sentado en el sofá de lino con cara de empresario millonario pervertido. 

Se pudo de pie y casi que no pude desviar la mirada de sus ojos si no fuera para ver el bulto que crecía en su pantalon. 

Trague en seco. Dios mío. Lo que me espera.


12

Sin decirme una plabra pero sin apartarme la mirada se arrodilló justo frente a mi. Al instante me di cuenta de lo que venía. ¿Con qué a esto se referían con una pequeña prueba? 

Erick beso suavemente mis pantarollias para luego recorrer con la punta de sus dedos mis piernas y la cara interna de mis muslos.

Sus dedos quisieron irse más alla de lo que sus amigos habían llegado y terminaron tocando mi humedad. 

No sabía si gritar, gemir, llorar o si reir de felicidad. 

Luego con su boca fue recorriendo el camino que antes habían marcado sus manos. Besando mis piernas, mordisqueandolas, recorriendo con la lengua la parte interna de mis muslos y besando y mordisqueando mi abdomen muy cerca de la zona baja. 

Me está matando. 

Quería estirar las manos, quería forzar a su cabeza a hundirse entre mis piernas. Pero estaba atada, bien atada y... abierta.

Gracias a dios pareció escucharme porque pude sentir ahí el suave roce de su lengua por encima de la ropa interior. Acto seguido se apartó, me miró y sonrió. De seguro debió de haber notado mi cara de exitación. 

Cerre los ojos por un instante y justo ahí senti como sus manos desgarraban mi ropa interior. ahora si estaba completamente expuesta. 

Christopher, Richard y Zabdiel me miraban con infinito deseo. Y yo los observaba confundida, curiosa, pero sobre todo hambrienta de sexo. 

Por fin los dedos de Erick me tocaron, con suave roce en el clitoris. Di un salto y por mucho que me esforce no pude evitar soltar el gemido más raro y exitante que había escuchado en toda mi vida. 

Y luego descendieron por todo mi sexo que ya estaba bien mojado, acariciandolo suavemente, jugando con el, aplicando presion en los lugares adecuados y estimulando donde es necesario. Como todo un experto. 

―¿Qué pasa TN? ¿Te gusta?―preguntó Zabdiel. Le dediqué una mirada fulminante.

No me gusta. Me encanta

Poco a poco la humedad fue llevando a Erick camino a introducir sus dedos dentro de mi. Me estaba volviendo loca. Primero puso un dedo, luego dos y los comenzo a mover con suavidad pra luego alcanzar un riitmo frenético. 

Me estaba retorciendo del gusto. Yo, con las piernas bien abiertas y Erick de cnco metiendo y sacando los dedos a toda velocidad. ¿Qué más me puede dar la vida? 

Exepto por lo que le seguía. Su lengua hizo contacto con mi sexo y lo recorrio de arriba abajo, todavía sin sacar sus dedos de dentro de mi. OMG.

Me succiono el clirotis con suavidad y recorrió todo de arriba abajo como si estuviera lamiendo una paleta de helado. 

―Mmm...

Más más más rápido. estuve a punto de decir. Pero luego recorde que no se puede. Esto va a ser una torura. 

Su lengua seguia moviendose de arriba abajo, lamiendo y chupando mi clitoris, lamiendo todo lo mojado y sus dedos se introducian cada vez mas dentro de mi. 

Mi cuerpo comenzó a arquearse más de lo normal. estaba a punto de dejarme ir y el pareció notarlo porque comenzó a introducir los dedos con más fuera. A decirme que se notaba cuanto me gustaba y a lamer cada vez más rápido.

Me lamía más rapido, me tocaba más rapido, me devoraba y succionaba cada vez con más ganas. 

Empece a tener palpitaciones. Sus dedos entraban y salian cada vez más de prisa. Estaba a punto. Su lengua jugueteaba con mi clitoris. Necsitaba más ya estaba a punto de deshacerme. Ya estaba a punto de tener un... 

Y se apartó. Así. Así sin venir a cuento se apartó. Se relamió lo que le quedaba alrededor de la boca y se retiró junto con los demás 

¿Qué? ¿Qué? ¿Qué? Ya entiendo por qué esa chica perdió. 
Voy a pedirmás ahora mismo

El cuerpo entero me palpitaba. Estaba temblando, con los pezones duros y el sexo mojado y deseoso de terminar. Esto no era justo. no era para nada justo. 

―¿Qué?... ¿Cómo?....¿Por qué?... ¿Por qué te detienes? 

―Para mi ya es suficiente―me dijo y senti unas ganas terribles de matarlo. 

Imbécil

Si no fuera porque estaba completamente atada le hubiera dado una bofetada, o ten cuidado y no le hubiera pateado la cara. 

―No se atrevan a jugar conmigo. 

―Ya lo hicimos―me dijo. 

¿Quiénlo diría eh? El Erick infoensivo de los CNCO: con carita de angel y ojos verde esmeralda queriendo dejarme con las ganas despues de haberme dado el sexo oral más increible de mi vida. 

―De eso se trata este juego muñeca―dijo Chris― Es hasta que nosotros queramos. Y no puedes pedir más. 

Me mordi el labio de la rabia que tenía y termine haciendome sangre. No puedo quedar asi, no asi. No, no y no. 

―Todavía puedo hacer una exepción por ti―dijo Erick y se paso relamió los labios. 

Automaticamente mi cuepo respondió con un escalofrío. Ese mal parido sabe como porvocarme. 

―Si y solo si―dijo Richard que se puso de pie y camino lentamente hasta colocarse a mi lado y acariciarme el cabello con suavidad. 

No quería que me acariciaran el cebllo. Queria que me tocaran las tetas, que me lamieran. quería sexo. No esta mierda de caricia. 

―Si y Solo si... Aceptas ser parte del juego. 

Jaj. Está loco. 

―Eso es chantaje―les dije pero ellos no responideron. 

Bastardos. 

―Piensatelo mejor―dijo Erick y puso su mano en mi pierna. quería que siguiera, quiería que me hiciera acabar. 

―Piensatelo Fallon―dijo Zabdiel y Erick recorrio la parte interna de mi muslo antes de llegar a mi sexo desnudo. estaba a punto. estaba a punto. no lo puedo  aguantar más. 

―¿Qué dices TN?―preguntó Chris―¿Quieres jugar con nosotros? 

Y la mano de Erick se colco completamente sobre mi sexo. lo agarró rapidamente y sin darme tiempo introdujo un dedo dentro de mi. 

Ese fue el detonante. mi cuerpo se arqueo en un arco perfecto. La espalda se elevo de la cama y los pechos me apuntaron al cielo. 

―Aaaaaah

Ya está. Me deje ir, me deje llevar. alcance la libertad que quería. Me acaba de correr.... delante de ellos. 

Y por supuesto la mao de Erick estaba empapada. 

Oh dios mio. Que sensación. que calor. que gusto. que emocion. que exitacion. que ganas de repetir. Que locura. 

―¿Y bien?―preguntó Richard. 

Los observe fijamente a los cuatro mientras mi pecho subía y bajaba y yo seguía completamente atada.  

Ellos sonreían perveros. si decía que si estas dos semanas no serán para nada como yo lo había pensado. 

―Estoy dentro―Les dije―Jugaré. 


13

Despierto. Pero aunque despierto no quiero abrir los ojos. Este colchon es tan suave y delicado y yo tengo las sabanas pegadas. Quiero quedarme en bajo la  comodidad de las almohadas de plumas para siempre. 

Las cortinas rojo vino están puestas por lo que el sol no entra y la habitación se mantiene en una penumbra encantadora. Las sabanas blancas impolutas me cubren y bajo ellas estoy yo, desnuda y más cómoda de lo que jamás he estado en ninguna cama.  Buenos días mundo.

Espera... !Desnuda! Oh. Dios. Mío. 

Me esfuerzo por evitarlo pero aún así me llegan rápidamente los vagos recuerdos de la noche anterior. ¿Qué hice? 

Cierro los ojos, como si así fuera a evitarlo. Pero al contrario, puedo ver con claridad el rostro de Erick enterrado entre mis piernas. Sus dedos tocándome y la mirada lasciva del resto de los chicos. 

Estoy muerta. Aunque también de solo pensarlo me entran cosquillas. ¿Qué estás pensando TN? Olvídalo ya. Estás muerta. 

¿Y ahora qué hago? ¿Cómo se supone que voy a mirarlos a la cara? ¿Cómo se supone que cumpla mi papel de asistenta? 

Mierda Mierda mierda. Malditos sean mi madre y David por hacerme emocionalmente vulnerable. Y malditos sean los CNCO por aprovecharse de eso. 

Mi cuerpo se retuerce. ¿Por qué dios mío? Por más que lo intento no puedo evitar recordar la maravillosa sensación del momento en el que Erick agarro mi sexo y termine... ¡¿Termine corriendome en sus dedos?! 

Estoy más que muerta. 

Sigo acostada, pensando y pensando. ¿Qué voy a hacer? ¿Y cómo lo voy a hacer? ¿Qué pensarán ellos de mi? 

Algo vibra  sobre la mesita de noche. Mi teléfono. 

Ay no. Quiero alcanzarlo. Pero sé lo que me espera. Llamadas perdidas, mensajes y audios de mi madre y porsupuesto...de David. Que fastidio. 

Ahora la situación es mucho peor de lo que antes. La llamada de mi madre solo empeoró las cosas y le tengo mucho más a rabia a David porque sé que por sui culpa se arruinará mi relación con ella. Pero bueno, en el fondo también es culpa mía. Yo nunca debí pensar en ellos y en el dinero antes que en mi misma. 

Tengo que lidiar con ellos. Sí. lo haré. tengo que enfrentarlos. 

Y con todo el pesar del mundo estiro el brazo y lo agarró para desbloquearlo. 

Si, claro que si. 312 mensajes que no voy a leer y 42 llamadas perdidas entre David, Mamá y Mónica. 

Le envió un mensaje a Mónica para confirmarle que todo está bien y decido que hoy no es el día para lidiar con ellos. Not Not Today. 

Tres minutos y cuarenta suspiros más tarde.

Tampoco es un buen día para lidiar con los CNCO. 

Voy a confiar en ellos y les daré un rato libre, porque necesito un tiempo para mi. Necesito relajarme y tomar un baño urgente. Estoy toda pegajosa y aunque no se nota mucho, sé que tengo pegado el olor a sexo. 

Sexo...Y recuerdo los ojos verdes de Erick mirando fijamente. Sexo... y recuerdo como se relamía los labios luego de haberme lamido. Es un goloso. 

Basta. Basta. Basta. I need to stop thinking about that. 

Me pongo de pie con cuidado y quito las cortinas. Bienvenidos seas Sol de LA City. Espero que hoy sea un buen día.

JAJA si como no. 

Meto los pies dentro de las pantuflas y me dirijo al baño mientras tarareo la canción de Dickie Hesitation. Es su primer éxito y sencillamente un temazo. 

3 minutos y ni un suspiro más tarde.

Lleno la tina de agua caliente. La necesito, necesito relajarme al cien por cien. Y la acompaño de sales relajantes con aroma de jazmín. 

Cuando esta lista me meto con cuidado hasta que el agua y la espuma me cubren por encima de los hombros.  Definitivamente los baños de burbujas son lo mejor del mundo y la sensación que provoca en tu piel es incomparable. Cuando me compré mi propia casa mandaré a instalar una tina como esta. O bueno quizá más pequeña. En esta monstruosidad cabrían perfectamente otras cuatro chicas como yo. 

O los cuatro CNCO, me dice mi subconsciente y sonrió. Tengo que sonreír y tengo que morderme el labio. 

Es increíble Caí directamente en su jueguito como las moscas en la miel. 

Espera un momento. ¿Juego?... ¡Juego!... 

¿Cómo se me había olvidado esa 'parte? Todo era parte de un juego y yo les dije que... Jugaría. 

Oh No.

Comencé a toser, casi me ahogo con mi propia saliva del susto. 

No, no y no. No puedo involucrarme en ninguna especie de jueguito sádico que tengan. Mi deber es asistirlos y evitar que hagan algo malo ante el ojo publico. Aunque me pregunto que pensarían las CNCOwners si se enteraran de que sus cuatro ídolos tienen montado un jueguito en el que se follan a las chicas pero luego se detienen cuando ellas están locas de placer y deseosas de más. ¿Jugarían? 

No lo sé. En fin... Tengo que dejarles bien claro que fue solo cosa de una noche y por muy divertido, loco, chocante, excitante, increíble, absurdo, confuso y genial que haya sido no puede volver a ser... Nunca más. 

Me encojo de hombros y meto la cara bajo el agua. 

Aquí se está tan a gusto y tan cómoda. Lejos del drama. Lejos de la responsabilidad lejos de los CNC....

Toc, Toc,Toc. 

Ay no. no no no Váyanse a joder a otra. Necesito estar tranquila

―¿Quién es? 

―Servicio de habitaciones. 

―Adelante. 

Vuelvo a hundir la cabeza dentro del agua y rezo porque realmente sea el servicio de habitaciones. 

Padre nuestro que estás en el cielo. Por favor te lo suplico que no sean ellos.

Pienso en todo lo que ha pasado en veinte y cuatro horas. Pienso en mi, en mis metas, en mis sueños, en que debo enfocarme en esta tarea y dejar a David y a mi madre de lado por un tiempo. También debo olvidar lo que pasó anoche. Estábamos muy borrachos, haremos como que nada ha pasado y ya está. 

Aja, ya está.

Cumpliré las ordenes de Katie de una manera estrictamente profesional y estas dos semanas pasaran volando. 

Sí. eso haré. Seré una profesional

Salgo a la superficie. Nueva, renovada, sonriente. Lista para lo que tengo que hacer. Pero cuando abro los ojos me llevó otro de los sustos más grandes de mi vida. 

Estaba ahí, de pie. Mirándome. ¿Qué este hotel no tiene verdadero servicio de habitaciones o qué? 

―Hello pretty girl. 

Richard Camacho, con su carita sonriente y su mirada seductora. ¿Qué está haciendo aquí? 

No digo nada. 

―I wanted to come and check How you doing. 

Bad. Very very bad. Ahora mismo estoy roja de la vergüenza de tenerte aquí frente a mi y para colmo estoy forzada a convivir contigo durante dos semanas después de que vieras como un compañero de banda tuyo me comía todo el... 

―I'm doing good thank...

No pude terminar de hablar porque sin pensárselo dos veces comenzó a desabotonarse su camisa amarilla playera. 

OMG stop. Stop Stop Righ Now. 

Por mucho que quisiera (o no) que se detuviera, mis labios estaban sellados. Deje que se desvistiera casi por completo y se metiera en bóxer a la bañera conmigo. 

Pero se puede saber por qué soy tan estúpida.

Una vez estuvo dentro me miró con ojos pervertidos. Trague en seco. 

―Last night was quite a show... right?  

―Yes―dije haciéndome la coqueta. No creo que eso haya salido bien―It was. 

Y sonreí descaradamente. 

Para TN para. Sé profesional. Para

―¿Qué te parece―sonrió― If...? 

Dilo Dilo. 

No, No, que no lo diga, que no lo diga. 

―If we play around little bit you and I

Sus ojos buscaron los míos y sus labios se dibujaron en una sonrisa perfecta y pervertida. ¿Cómo podría decirle que no a eso? 


14

Estamos aquí en la bañera. en silencio, uno frente al otro. Yo desnuda, el casi. Me quedo embobada mirándole los despampanantes y sexys tatuajes. Estoy perdida, todavía no me ha dicho ni una palabra y ya estoy empezando a sentir pequeños escalofríos por todo mi cuerpo, 

¿Pero cómo evitarlo? Si está tan bueno. EL tono de su piel me llama y esos abdominales marcados a la perfección me incitan a pasarles la lengua como a tableta de chocolate. 

Quiero comenzar donde está la A e ir descendiendo lentamente. Quiero mmm... quiero y no puedo evitar morderme el labio. 

ÉL se da cuenta, y sonríe y por su puesto le devuelvo la sonrisa. Intento comportarme decentemente pero me lo pone muy difícil. 

Casi como si entendiera que mi cuerpo está loco por entrar en contacto con el suyo comenzó a acariciar mis piernas con los pulgares. 

―Richard―dije sin saber que decir después. 

―TN Fallom―dijo sonriendo con la voz más sexy del mundo y entonces supe que estaba perdida. 

Sus manos habilidosas recorrieron todo el camino de mis piernas desnudas para entrar en contacto con mi sexo. 

Me tocó y pude tocar el cielo por un segundo. 

―¿Te gusta?―Me preguntó con voz de cachorrito enfermo y asentí con la cabeza. 

Decir que me gusta es decir poco. 

―Abre las piernas. 

Sé que debería haberme negado. Sé que debería haberme  resistido pero hice caso y ayudadas por sus manos mis piernas se abrieron para que sus dedo medio e índice me tocaran el cítorIs y luego se introdujeran poco a poco dentro de mi. 

Ahhhh gemi descontroladamente. Que delicia. Ya yo estaba mojada de sobra lo que hizo el proceso fue mucho más fácil de lo que ambos nos imaginábamos. 

―Look at you... so thight since the moment we meet you. And now retorciéndote in my hands. 

Sonreí. ¿Significará eso que me habían echado el ojo desde nuestro primer encuentro?. 

Me arquee hacia atrás buscando que sus dedos entraran más profundo y termine por sacar los pechos del agua. Él rapidísimo se lanzo a besarlos mientras con la otro mano seguía metiendo y sacando con suavidad. 

―Me estás volviendo loco. Tú lo sabes verdad? 

 No tenía ni idea. Pensé que la única loca de placer aqui era yo. 

Y tras sus palabras no pude evitarlo. Me lance a besarlo y a agarrarme de su cuello. La forma en la que me besaba y mordisqueaba los pechos me tenía tan caliente que lo hice. Me agarre de su cuello tan fuerte que hice que parara de masturbarme para que me cogiera el culo con ambas manos y lo abriera. 

Sabía lo que buscaba con eso.  Y lo quería. Lo quería mucho. 

Me deje caer sobre él y pude sentir su claramente su erección. Queriendo rozarse con mi sexo  únicamente separados por la tela negra y mojada del bóxer. 

Me agarré a su espalda y la acaricie con suavidad. Me gustaba admirar su musculatura.  Saber que semejante hombre estaba a punto de ser mío. 

―Mírala―tuvo que decir―Que puta. 

Oh no no no. Que no diga eso, por favor. 

Me besó con más ganas y volvió a llevar su mano hasta mi centro. ¿Por qué? ¿Por qué la tortura? ¿Por qué no pasar ya a la acción? 

No tuve más remedio que dejarme toquetear. Deje que mordisqueara mis pezones a su antojo y besara y lamiera mis senos mientras sentía como su mano me acariciaba ahí abajo. Como le daba suaves toquecitos a mi clítoris y luego me introducía los dedos a ritmo frenético. 

―Richard... Ri...Ri...Richard

Acabe gimiendo su nombre como toda una puta loca de placer y cuando vi la amplia sonrisa en su rostro fue que comprendí que eso era lo que quería. Ver como me llevaba al límite.

Entonces me levanto en brazos y me sacó de la bañera. 

¿Qué? ¿Qué? ¿Qué? 

No estás bromeando verdad. eso no será todo. 

Incluso si su intención es dejarme a mi con las ganas el también acabaría perdiendo. 

Y se desnudó. Si, se desnudó mientras yo pensaba en las musarañas. 

Fue increible, sus abdominales, su sonrisa su cuerpo desnudo. su miembro erecto que me invitaba a tocarlo y a lamerlo. Me quede boquiabierta. 

Quería... quería... quería que me follara. 

Se acercó a mi y con mucho cuidado me cerró los labios que todavía seguían abiertos por el tremendo shock que me lleve. Acto seguido me agarró del pelo. 

―Vamos a darte lo que quieres. 

Y me empujo hacia la cama. 

Caí a gatas y con mucho cuidado trate de recomponerme. él tomó asiento y quedó frente a mi con todo aquello apuntando hacia el cielo. 

Me hizo una señal, y comprendí que quería que lo montara. 

Me acerque despacio. . No puedo creer que esté a apunto de hacer esto. 

―What are you waiting for.. I know you want it. 

Y me jalo del brazo obligándome a quedar encima suyo. Me agarró las piernas con fuerza y las puso una a cada lado de su cuerpo. Me agarró ambos pechos con las manos y me miró directamente a los ojos. 

―Ya eres mía―me dijo―Obedece.

Y volvió a jalarme del pelo. 

―Yes Daddy. 

Le dije y cambie mi vista en dirección a su miembro. Lo agarré con la mano y comencé a bajar lentamente y a introducirlo poco a poco dentro de mi. Primero el glande y luego todo lo demás. 

―Arghhh―gimió él. 

Le gusta. Le encanta. Por supuesto que le encanta tanto como a mi. 

Termine de introducirlo todo y me agarré de su cuello. 

Lo hice con tanta fuerza que terminó cayendo sobre la cama. pero no  importaba. Así era incluso mejor. 

Me agarró las nalgas y me abrió el culo tanto como pudo. Comencé a moverme, lentamente. sintiéndome completamente llena mientras todo él entraba y salía de dentro de mi. 

Él estaba gimiendo, y yo también. 

Mis caderas comenzaron a tomar ritmo mientras él me sostenía las tetas y me las apretaba. Comencé a moverme cada vez más deprisa con movimientos circulares y pendulares que parecían encantarles. 

A cada segundo aprovechaba para meterla cada vez más y yo para apretar su miembro y sentirlo todo dentro de mi. 

―Más rápido perra―y me dió una nalgada. 

No me importó para nada. Ni siquiera podía notar el dolor. Solo la excitación. 

―Más rápido―volvió a decir y volvió a nalguearme―Más rápido. 

Yo obedecí. puse las manos sobre su pecho y comencé a moverme más de prisa. de arriba abajo saltando sobre su miembro y montándolo lo mejor que podía. 

―Just like that―me dijo. 

Su voz de pervertido me volvía loca. 

Mi sexo palpitaba cada vez más mojado y abierto. Él estaba a punto de correrse, porque estaba dejando escapar gemidos de más y yo no podía quedarme con ganas de más. No o acabaría pidiendo más y perdiendo el dichoso juego. 

Decidida a no perder y obtener lo que merezco que me agarre con fuerza de su pecho y moví la cintura lo más rápido y mejor que pude para que su pene entrara más profundo y saliera cada vez más deprisa. Mi cuerpo comenzó a temblar. 

―Si si si Ri...Richard.

Comencé a gritar como una loca mientras convulsionaba y sentía como él se dejaba ir .. 

Me invadió la sensación de un liquido caliente inundándome toda. Una sensación rara como ninguna otra que hubiera sentido en mi vida que hizo que por primera vez me corriera como una cascada de manantial hasta quedarme vacía. 

Él me apretó mientras yo me agarraba a su espalda con todas mis fuerzas. Nos miramos, cómplices y sonrientes y poco a poco fuimos disminuyendo el ritmo hasta finalmente volver a la calma. Me levante un poco para sacar su pene de dentro de mi y me deje caer sobre su pecho. 


15

Su pecho subía y bajaba debajo que el mío. Podía notar su respiración agitada y sin aliento y el olor a sexo que ahora si inundando la habitación. 

Dios. La había cagado otra vez. Parece que no aprendo y Dios.. ¿¡Se corrió dentro de mi!?

Me levanto de sopetón. 

―¿What happen?―pregunta asustado. 

―You... and I.... We...We did... Lo hicimos sin condón y te corriste dentro. 

Abrió los ojos como platos y se levantó incluso más rápido que yo. 

―Shit. I screw up again. Let's get you the pill 

―Si.

Si. Si. exactamente eso. La píldora del día después. Eso resolverá todos nuestros problemas. aunque no es que sea segura al cien por cien. 

Definitivamente soy estúpida. 

―¿Por qué no trajiste condón? 

―I did bring them. Están en mi pantalón. 

Mierda. El pantalón se quedó en el baño. ¿En que mierda estábamos pensando? 

―Shit Tn. Lets get the pill now. 

―Oh yeah―le dije―No hay nadie que quiera conseguir la puta pastilla más que yo.

Discutimos un poco más echándonos la culpa el uno al otro pero luego estuvimos de acuerdo en tomar al menos una ducha primero. Y mientras nos duchábamos juntos... 

...Paso lo inevitable. 

Mientras me enjabonaba su pene empezó a rozarse a rozarse con mi cuerpo. Al principio hice caso omiso, pero luego se me hizo imposible de ignorar. Toda esa carne deslizándose ¨sin querer¨ entre mis muslos era demasiado.

―Ni te creas que vas a follarme otra vez―le dije pero a pareció no importarle porque se encogió de hombros de lo más tranquilo. 

―¿Quién dijo nada de follar eh? 

Y se agachó en un segundo. Me abrió las piernas y comenzó pego su lengua a mi sexo. 

Mi cuerpo se elevo. Richard Camacho con la cara metida ahí abajo y la lengua recorriéndome de arriba abajo.  Lamiendo todos mis jugos y saboreando mi intimidad. 

Aghhhh mmm. Deje que se me escaparan gemidos. ¿Qué otra cosa se supone que hiciera? 

―¿Quieres que siga? 

Asentí. Quiero que me lama hasta que me deje completamente seca. 

Y me agarró las piernas con más fuerza para hacer presión en mi clítoris. Comenzó a pasar la lengua primero despacio y cada vez más y más rápido. Solo haciendo una misera pequeñísima pausa para respirar. Me estaba volviendo loca. 

Toda esa presión sobre mi clítoris así como el suave y caliente tacto de su lengua se concentraba en esa zona. Me lamía tan de prisa que mi cuerpo reaccionó más rápido de lo que me esperaba y  pase de cero a cien en unos minutos. 

Comencé a temblar y le agarré del pelo, hice que su boca se pegara más a mis sexo, que lo recorriera completo, me lamiera el clítoris y se deslizara vagina abajo. 

―Si.. si... Asi... Me corro. Me.... 

―Aja...That's enough for now. 

Se puso de pie,  relamió los labios, se envolvió en la toalla y salió de la ducha. 

¿Qué?

Pero que idiota. Igualito que el hijo de puta de Erick. 

Mis mejillas enrojecidas y el sube y baja de mis pechos no le iban a permitir salirse con la suya. Si al final no voy a jugar este maldito juego tengo que aprovechar la oportunidad ahora.  

―Oye... Regresa aquí ahora mismo. Quiero ma... 

¡Señor le he dicho que no puede entrar! ¡Señor por favor! Está infligiendo las normas del hotel. Señor por favor regrese abajo y le informaremos a la señorita si desea recibirlo. ¡Señor no! ¡Señor por favor!

―No me importa nada de eso―Escuche la voz de David.

Mierda. Mierda Mierda. 

Comenzó a golpear la puerta. Golpes estruendosos, duros. Probablemente todo el hotel se enteraría. 

―¡Tn soy yo. Abre la puerta! 

Pero no tardó mucho en darse cuenta de que la puerta estaba abierta y entró. Porque el imbécil de Richard tenía que dejar la puerta abierta

―Tn estoy aquí. Soy yo, tu novio. ¡Ven aquí ahora mismo! 

Por dios. Ahora qué se supone que voy a hacer. Mi novio al que llevo un día ignorando al otro lado de la habitación furioso y yo encerrada en el baño con Richard Camacho con quien para colmo acabo de tener sexo desprotegido. 

Ahora si que estoy más que muerta. 


16

Estoy de pie, desnuda bajo la toalla y temblando. En parte por el frío, en parte por Richard, pero sobre todo por David porque jamás lo había visto tan furioso como ahora. 

...Eres la mujer de mi vida y tienes que mentalizarte para eso. ¿Crees que ignorarme sirve de algo? ¿Crees que tengo que estar llorando por ti? ¿Crees que mis sentimientos son un juego? ¿Crees que puedes gosthearme cuando te de la gana? ¡Responde TN! 

Lo observo con los ojos bien abiertos. Pero no puedo decir nada. Estoy petrificada.

― Te llamé, te envié mensajes y no respondías. Te busqué por cada uno de los hoteles de esta maldita ciudad. ¿Crees que mi corazón es un juguete? ¡Responde TN!...¡Responde algo!

―He...He estado muy ocupada. 

Suelta una carcajada y un suspiro. Como si lo que acabara de decir le pareciera un chiste. Su frente está muy arrugada y sus ojos tienen un toque de locura. Este no es David, este no es David. no puede ser el mismo chico de cabello castaño que me conquisto una vez. 

―¡Siempre tienes que tener tiempo para mi! Pensé que eso ya te había quedado claro. Tú y yo somos uno, TN Fallom y David Rockefeller conquistaremos el mundo y crearemos un imperio incluso más grande que el de mis padres, pero solo si estamos unidos. ¿No estamos unidos TN? 

No, no. Claro que no. No lo estamos desde hace muchísimo tiempo. Tú estás loco y yo me he dejado envolver para complacer a mi madre y no romperte el corazón. Pero ya no quiero ser parte de esto. Ya no quiero tener que seguir fingiendo. 

Y derrpente me abraza. en menos de un segundo me jala de brazo y me acurruca contra su pecho mientras yo sigo petrificada como una estúpida. 

―Eres la mujer de mi vida, quiero que lo sepas. Este comportamiento infantil no se puede volver a repetir. Estaba tan preocupado por ti―me acaricia el cabello―. Sabes que te necesito a mi lado. No vuelvas a hacerme esto. No sé si te lo voy a dejar pasar una próxima vez. En serio... solo quiero lo mejor para los dos. Hueles muy bien. Extrañaba tanto tu perfume.

No sé... no sé como reaccionar. No sé que decirle. No sé que hacer. Y para colmo siento un extraño confort entre sus brazos. La forma en que sus pulgares me acarician el cabello me hacen recordar esos días en los que lo era todo para mi. 

No pude evitarlo. Mis ojos se llenaron de lagrimas y he comenzado a llorar. ¿Qué me está pasando? ¿Por qué me estoy emocionando con su abrazo? ¿Qué está pasando conmigo? 

―Mi bella Tn―dice y me da un beso en los labios― Esto solo ha sido una pequeña piedra en nuestro camino. Te castigaré por unos días y luego lo superaremos. Ahora deja de llorar. Ya estoy aquí. 

Y me abraza más fuerte, lo que provoca que me eche a llorar otra. No quiero esto. No quiero seguir en esta relación. No quiero seguir sufriendo porque tú... y mi madre y también los cnco me están volviendo completamente loca.  

―David―le digo con la voz tan suave como un suspiro. No quiero que se vuelva a enfadar― ¿Por qué estás aquí? 

―Por ti―sonríe―porque no soporto tenerte lejos. Y porque la Uni no es nada sin ti. 

Imagino que los días son diferentes cuando no tienes nadie a quien controlar.

―Estoy ocupada, estoy trabajando. ¿No te parece un poco obsesivo viajar hacia la otra punta del país solo para verme? 

―Puede que si, pero ya me conoces y sabes que soy un romántico. Además, tengo un asunto urgente que no puede esperar. 

¿De qué asunto urgente habla? Bueno, sea lo que sea da igual. No me puedo dejar guiar por la extraña comodidad que sentí antes entre sus brazos. Tengo que pensar en mi y en quien quiero ser. Solo lograré ser reconocida por Tn Fallom si salgo de la sombra de David. Además si David es un romántico no quiero esa clase de romanticismo en vida. Quiero ser independiente . 

 ―Igual yo. Realmente tengo importante que decirte. 

Y sonríe él pobre. No tiene ni idea de la que le va a caer encima. No tiene ni idea de que estoy a punto de dejarlo. No tiene ni idea de que ya no quiero seguir con él. y aunque decepcione a mi madre, a mi padre y a los suyos no me estaré defraudando a mi misma. 

―Lo que quieras mientras no sea más importante que esto―Dice mientras se arrodilla. 

¿Qué? ¿Qué? ¿Qué? 

Si, se arrodilló en el suelo con un gesto galante y sacó del bolsillo de su chaqueta una cajita negra redonda que se abrió en un gesto dramático y sacó a relucir un anillo de compromiso brillante y hermoso. 

No. No. No. ¿Qué estás haciendo David? 

―TN Fallom... 

Que no lo diga...Que no lo diga por favor. Richard está escuchando en el baño. 

―...¿Te casarías conmigo? 

TEEEE  QUIIIIEEEREEES  CAAASAAR  COOONMIGOOO 

La cabeza me ha dado mil vueltas en tres segundos. No puede ser posible. No puede ser real. No en este momento. Yo... yo estaba a punto de dejarte y tú me pides matrimonio. 

WTF Jesus what are u playing me like this?

No sé que hacer. Bueno si sé... Quiero esconderme debajo de una piedra y quedarme ahí para siempre. Conozco a David como la palma de mi mano o al menos eso creo y si rechazarlo sería duro e incluso peligroso, rechazarlo luego de que se propusiera sería una autentica locura que podía incluso poner mi vida en riesgo. 

Mátenme. En serio, mátenme.

Está sonriéndome. Con su sonrisa perfecta y completamente blanca. Mirándome a los ojos. esperando que diga que si. Se supone que tengo que brincar, saltar, chillar y abrazarlo. Sé supone que tengo que decir que quiero ser su espos... 

―David no... no puedo h... 

―Tranquila rosita―dice y me toma de la mano. 

No. No. No puede estar jugando esa carta. Rosita es el apodo cariñoso que me puso hace años cuando éramos niños. Cuando yo esperaba con ansias a que me diera un beso en la mejilla y el simple hecho de tomarnos de las manos significaba el mundo entero. 

―No tienes que decir que si ahora―me besó la mano―. Solo piénsatelo―Y luego colocó lentamente e anillo en mi dedo índice. 

Pestañeé. 

No podía creérmelo. Era hermoso, pequeñito brillante y fino. Todo lo que una chica podía pedirle a la vida. Todo lo que mi madre había soñado para mi. Todo lo que... 

―David no tienes que hacer esto. Seguro que es muy caro y... 

―Que va. Solo una baratija de veinte mil dólares. Lo compré en un impulso. Si no te gusta podemos cambiártelo enseguida. 

―No... no es eso. 

Algo vibra en su bolsillo. Su teléfono

Se aleja para contestarlo y yo me quedo mirando el diamante y como la luz se refleja en él. 

Se pueden ver los colores del arcoíris. Es la cosa más maravillosa que he visto en la vida. 

―Si, correcto. Nos vemos en diez minutos. 

Cuelga el teléfono

―Debo irme amor, pero volveré para invitarte a cenar. Ordenaré un vestido para ti. Esta noche será importante. 

Y me besa. Me coge de la cintura y yo le agarró del cuello para que sus labios se envuelvan con los míos. ¿Qué estoy haciendo? ¿Me estoy dejando llevar? Lo beso con los ojos cerrados y dejo que el me bese con tanta pasión como quiera. 

―Ya me contarás esta noche como fue que pasaste de ser una becaria con reservación en tres estrellas a un VIP en el Solárium. Adiós Te amo futura señora Rockefeller. 

Veo como se marcha y suspiró

¿Futura señora Rockefeller? ¿En serio?


17

Me siento y me dejo caer sobre la cama. No sé que acaba de pasar. No sé que clase de hechizo ha usado David contra mi pero me ha descolocado. Mi cabeza no para de dar vueltas. 

No he dicho que si aún pero técnicamente tampoco no he dicho que no. Y si David ya ha hablado con mi madre estoy enredada en una trampa mucho más grande de la que puedo llegar a imaginarme. La gran pregunta es...¿Aceptaré casarme con David? 

―Congratulations to the happy couple―aplaude.

No dije nada. Qué se supone que le diga si ya lo sabe todo. Estoy segurísima de que desde el baño pudo escuchar nuestra conversación con pelos y detalles. Solo espero que no intente chantajearme con David porque ahí si que no sé como reaccionar. 

―¿Lo tenías bien escondido eh?

Oigo como sus pasos se acercan hacia mi

―¿Qué quieres Richard?

―Nada preciosa, puedes relajarte―Y levanta las manos en el aire. 

Tengo que reírme, es un payaso. 

―Entonces qué haces aquí. Tienes que irte a buscar la píldora. Rápido.

Si. Si por favor. Lo último que necesito ahora mismo es quedarme embarazada de otro hombre que no sea David. Espera un momento WTF ¿Qué estoy diciendo? Lo último que necesito ahora mismo es quedarme embarazada, sea de quien sea. 

―Tierra llamando a Tn―dice y se acerca a mi. 

Estuve ida por un segundo. Es que el tema embarazo me da repeluz.

―Lo siento. ¿Qué decías?

―Que antes tengo que darte un regalo de compromiso. 

―¿De qué hablas?―Me rio y le miro a los ojos. 

Y cuando me guiña uno de ellos comprendo que ya he caído en su trampa. 

Sin decir ni una palabra más se coloca con  una pierna a cada uno de mis lados sobre la cama y se desabotona la camisa lentamente. 

Sé que tengo que apartarlo. Sé que tengo que decirle que se vaya... pero me quedó hipnotizada viendo como esos cuadros perfectos que marcan su abdomen se van descubriendo poco a poco. Es tan sensual.. es tan masculino. es tan provocador... es tan... sexual y apetecible. 

Me vuelve a guiñar el ojo y con cuidado me levanta la barbilla y me besa en el beso más delicioso y húmedo que he dado hasta ahora en mi vida. 

Sus manos se aferraron a mi cintura y su lengua se abrió paso entre mis labios. Sus manos acariciaron mi espalda y su entrepierna se pegó a la mía. 

Richard Camacho. ¿Por qué no me dejas en paz? Eres una tentación dulce... muy dulce. Pero... me acaban de proponer matrimonio. No sería una mujer muy decente si hiciera lo que estás planeando hacer conmigo. 

―No creo que debamos hacer esto―digo e intento levantarme.

 Pero por supuesto no no lo logro. Su cuerpo es mucho más fuerte que el mío y está haciendo presión para que no me levante. Lo único que consigo es caerme hacia el otro lado y quedar acostada boca arriba con los pechos desnudos bajo la toalla apuntando hacia él. 

―Richard seriously. My boyfriend just gave me a ring. I can't do this. 

―Shhh―me tapa los labios con un dedo―Tú quieres esto tanto como yo.

Y con un jalón se deshace de mi toalla y quedo totalmente desnuda y expuesta bajo su cuerpo.  

Mis pezones apuntan al cielo y las cosquillas recorren todo mi cuerpo. No hace ni cinco minutos que David salió de la habitación. ¿En serio voy a hacer esto? 

Me agarra uno de los pechos con fuerza y delicadamente empieza a besarme el otro. Es un contraste maravilloso, divino. es el cielo mismo y lo estoy tocando gracias a Richard Camacho. 

―Para. No puedo hacer esto. No ahora. 

Su mano se desliza, por entre mis pechos, bajando por todo mi abdomen y dibujando la silueta de mi cintura hasta llegar al monte de venus. 

Nada más sentir su roce  miles de palpitaciones se apoderaron de mi. Sus dedos habilidosos saben exactamente en que lugares tocarme y el clítoris es justamente uno de ellos. 

Me está mirando mientras le da pequeños toquecitos y se ríe. Se ríe porque está viendo el efecto que tiene sobre mi. Se ríe porque desde su posición puede ver perfectamente como me estoy mojando. 

―Naughty girl―me dijo y tuve que reir también. 

Jamás me había sentido tan bien haciendo una maldad como esta. Lo siento mucho David. De verdad.

Sus dedos se deslizan y mis piernas se abren para recibirlos. Los quiero bien adentro. quiero que me den todo el placer del que sean capaces. 

Aaaaah―gemí y―Aaaaaa―volví a gemir. 

Como no hacerlo si tengo a Richard Camacho observándome como me retuerzo de placer con sus dedos dentro de mi mientras me observa juguetón  y aumenta y disminuye el ritmo a conveniencia con tal de ver como me vuelve loca. 

―Me encanta como te ves así. 

Sonreí. Y a mi me encanta como se ve él con esa cara de travieso. 

Finalmente saca los dedos de mi interior. Y me sorprende ver como los lame y los chupa. No pensé que fuera posible calentarme más de lo que estaba pero él lo acababa de conseguir. 

Se acomodó y se bajó el bóxer y el pantalón con cuidado dejando su miembro desnudo a relucir. Me mordí el labio inferior. Todo eso estaba a punto de ser mío. 

Por favor que David no haya dado la vuelta y venga para acá porque si es así estoy muerta. 

Saca un preservativo del bolsillo y se lo coloca. Ambos nos reímos y mientras se tomaba un minuto más para lamer mis pechos yo abrí las piernas y comence a arquearme y moverme poco a poco buscando que me penetrara por fin. 

―Don't be desperate. 

―Cállate Camacho

―Shhh―Let me enjoy it. Esta va a ser mi primera vez follando a una chica comprometida. 

¿Qué? 

Y justo en ese instante su pene se deslizo entre la humedad de mi vagina y me penetró de golpe. 

―Aaaaaaaaaaaagh―gemí deliciosamente. 

Esto era mejor que cualquier encuentro sexual que haya tenido con David en el pasado. 

Se acomodó y comenzó a moverse. A penetrarme suavemente y sacar y meter su pene de mis adentros. Yo perdida de placer me aferre a él y aprete las piernas en torno a su cuerpo para sentirlo aún más profundo. 

Nuestros cuerpos se movían en un baile suave y sensual y nuestros cuerpos formaban uno solo para luego separarse y luego juntarse otra vez. Su aliento estaba junto al mío y sus suspiros devoraban mis gemidos. 

―Así Richard―Así―gemí bajo su cuerpo. 

La forma en que entraba y salía de mi interior me volvía loca. Sus movimientos comenzaron a apesararse y lo que antes era suave se convirtió cada vez más en feroz. 

Pero me encantaba, me encantaba que la metiera cada vez más fuerte y que me apretara cada vez con más fuerza. Me encantaba como me follaba. me encantaba como gemía mi nombre bajito. Me encantaba como me hacía suya. 

―Si...Si...Así...Así. 

No me importó que pudieran oírnos, comencé a gemir agritos y él comenzó a suspirar cada vez más alto y a penetrarme con más fuerza. 

Su pene cada vez tocaba más profundo y mi interior palpitaba cada vez más. Estábamos a punto de corrernos. y esta vez si que era seguro. 

―¿Así te gusta eh? 

―Si...si...si... así por favor. 

Y se apoyó de la cama para embestirme esta vez con muchísima más fuerza y llenarme todo con su miembro mientras yo ponía los ojos en blanco y perdía el sentido al paso que gritaba su nombre por todo lo alto. 

Era demasiado, el calor, el sudor, el olor a sexo, mi espalda arqueada, sus brazos tonificados. mis piernas alrededor de su cuerpo, su aliento caliente y su polla bien dentro de mi me llevaron al punto delicioso en el que estallaba de placer. 

―Richard si... si.... si...Más duro...Me corr..

―Argh―Gmió él bien fuerte y en una frenética embestida se dejo ir totalmente corriéndose dentro de mi. 

Mi espalda se elevó de la cama ligera como una pluma y me aferre a su cuerpo con lo último que me quedaba de fuerza. No podía parar, no ahora. 

―Más. Quiero más. Richard quiero más. 

Pero le estaba hablando a una pared. 

―Lo siento preciosa. Si quieres más vas a tener que venir a buscarlo esta noche. 

―Espera Richard, no te...

Y moviéndose hacia un lado para salir de mi interior, se dejó caer agotado sobre la cama casi desfallecido. . 


18

Cayó la noche y yo estoy lista para la cena. 

Me siento rara, rarísima, pero también me siento picara, atrevida y más viva que nunca...¿Se debe a lo que paso esta tarde con Richard? Seguramente si. Pero bueno. he decidido tomarme el día para mi. Si al final me voy a casar debería de aprovechar estos últimos días de soltería. 

Me paro frente al espejo. Luzco espectacular en este vestido azul marino que David mando a traer para mi. Y su peluquera me recogió el pelo en un moño elegante pero con algunos  cabellos sueltos que le dan un pequeñísimo pero perfecto toque casual. 

Me pregunto que pensaría Camacho si me viera así. De seguro que me arrancaría el vestido en menos de cinco segundos y me follaría en menos de diez. No puedo evitar morderme el labio. Realmente me siento traviesa hoy. 

En cuanto a mis deberes de asistenta... la verdad es que los mande a volar a todos. Estaba... corrección estoy impactada con la proposición de David y no tenía la cabeza para cuidar de ellos. Pero por supuesto pude resolverlo todo con mi inteligencia magistral. 

Antes de que Richard se fuera tome la tarjeta de su habitación y me escabullí mientras ellos estaban en la piscina. Aproveché que ahí estaba una extra de la habitación de Zabdiel y Erick y me hice con las cuatro llaves principales y las dos extras. Les llamé y les dije que quería verlos por separado y cayeron redonditos en la trampa. Cada cnco encerrado en su habitación libre de cometer cualquier locura mientras yo resuelvo el pequeñisimo problema de mi estatus marital. 

Me pregunto si tendré frío. La tela de este vestido no cubre la espalda y no sé si la malla transparente será suficiente para mantenerme calentita mientras dure la comida. 

Bueno da igual. David siempre podrá prestarme su chaqueta. 

David... suspiró y me quedo observando mi nueva adquisición. Y no hablo de lo que tiene entre las piernas Richard de Cnco, sino de mi baratija de veinte mil dólares. 

Mi pequeño diamante brilla incluso más que yo con este vestido y eso es mucho decir. Estoy segura de que todas y cada una de las chicas con las que me cruce hoy durante el camino sentirán envidia de semejante pieza de joyería, que para colmo combina con el collar de diamantes que me envió mi aún no prometido. Con una nota que dice para la futura señora Rockefeller. Me siento criminal por no dudar en ponérmelo.

Siento mariposas en el estomago. O más bien ganas de vomitar. Quiero tener ese anillo en mi dedo, quiero vestir de azul celeste, zapatos de tacón finos y diamantes pero... ¿Quiero a David? Estaba a punto de dejarlo antes de que se propusiera y... lo he engañado con los chicos de cnco. Más de una vez ya. 

Toc Toc Toc. 

―Adelante―Sonrió.

Esta es una noche especial. Tengo que verme sonriente y hermosa. 

―¿Te puedes creer que el ala entera VIP está reservada en este y los diez hoteles más cercanos? Y para colmo me han dicho que no puedo dormir en tu habitación porque es personal. Mañana pienso comprar este hotel y... Wow, estás espectacular. 

Sonrió. Si que lo estoy. estoy fuerte y poderosa porque el diamante así lo quiere. Se podría decir que esta noche brillo más que la luna. 

―Madmoislle, acompáñeme―dijo David y me tendió la mano. 

Se la di y deje que me condujera por el pasillo de paredes rojo vino y lámparas finas hacia la recepción. Hacía su Lamborghini y condujera hacia un restaurante de estrellas Michelin. La vida en la universidad es tan relajada y molesta que casi olvido que David tiene más dinero del que mi familia podría soñar tener en tres generaciones. Pero sé que hay alguien que no lo olvida ni por un segundo.... tachán...Mii madre. 

Y hablando de mi madre. 

―David que guapo mi nuero. Y TN te ves preciosa hoy hija. 

Nos está esperando en la puerta. Típico de ella. Enseguida se mete en el medio de ambos y me aparta. 

―Espero que hayas recapacitado TN. No me gustó nada la conversación que tuvimos anoche. 

―¿Cómo llegaste tan rápido? 

―David nos consiguió tickets de avión... y en primera clase. Nos dijo que el jet privado estaba ocupado. 

Miro el anillo. Si digo que si un jet privado podría ser todo mío. 

― Ahora responde mi pregunta Tn Fallom Contreras. 

―Tranquila mamá. ¿Estoy aquí con David con verdad?―dije y alce la mano para que contemplara el anillo. 

Vi sus ojos brillar de emoción, como tenían que haber brillado los míos en aquel momento. Y vi su sonrisa plena y hermosa brillar como debería de haberlo hecho la mía. 

―Dios mío mi niña. ¡Lo lograste!―susurra con cuidado de que David no la escuche. 

Yo solo sonrió. Me alegra verla feliz. Por lo menos debe de haber alguien que este feliz. 

―¿Entramos?―dijo David poniéndome la mano en la cintura. 

No lo había notado hasta ahora, pero la verdad era que David también lucía muy bien esta noche. Su traje azul marino combinaba con mi vestido y lo acompañaba con una camiseta blanca que resaltaba su figura. Para no hablar de sus zapatos elegantes y su cabello castaño elegante peinado a la perfección. 

Realmente lucíamos como una pareja que se acababa de comprometer. 

Entramos al lugar más perfecto y caro en el que jamás había puesto un pie. Mesas con mantel dorado y cubiertos brillantes me dejaron deslumbrada. Las servilletas dobladas en forma de cisnes y el uniforme impecable de los camareros. Habíamos cenado muchas veces en la lujosa mansión de los Rockefeller pero no se comparaba con este glamour. 

―Mi querida TN―dijo Elvira la mamá de David mientras se ponía de pie para saludarme con un beso en la mejilla y un cálido abrazo. 

Elvira es una mujer maravillosa. Cálida, buena, inteligente y sencilla a pesar de que literalmente está nadando en oro. La conozco de muchísimos años ya y siempre me ha tratado con una amabilidad inigualable. Y si bien es cierto que no es que seamos tan unidas siempre ha existido un cariño especial entre nosotras. Ojala pudiera casarme con la madre y no con el hijo. 

Me extraña verla sola. Por lo general ella y su marido siempre están juntos. Los padres de David son un matrimonio ideal, se nota que su amor es más que una fachada y eso es más de lo que se puede esperar para cualquier pareja de millonaria

―David me ha dado la buena noticia. Enhorabuena. 

Sonríe, pero veo un atibisbo de tristeza en sus ojos. No puede ser, ¿Será que sabe lo que está pasando? ¿No quiere que me case con su hijo?

―Serás una buena señora Rockefeller. 

Me preguntó si David le habrá mencionado el hecho de que todavía no he aceptado. O si en realidad ya acepté pero yo soy la única que todavía no lo sabe. 

―Muchas gracias. Tanto tiempo sin verte. ¿Cómo van las cosas? ¿Cómo está Bruno? 

Un silencio incomodo reino el ambiente. Su rostro se ensombreció y su sonrisa se desdibujó. Mi madre me dedico una mirada asesina y David tuvo que salir en mi defensa. 

¿Se habrán divorciado? Dios mío, De seguro metí la pata hasta el fondo. 

―Aún no le he contado a TN madre. Lo siento―dijo David y me miró con ojos tristes. 

Estoy desconcertada. ¿Podría alguien por favor decirme que está pasando que es tan malo? 

―El motivo por el que vinimos hasta acá es porque aquí se encuentra la mejor clínica del país. Mi padre fue diagnosticado de cáncer hace años y lo mantuvo en secreto. Ahora los doctores dicen...

Mi madre le puso la mano en el hombro y la suya se secó las lagrimas delicadamente con una servilleta. David carraspeó la garganta. Se notaba claramente su esfuerzo por contener las lagrimas. 

―No le queda mucho tiempo querida―intervino Elvira―por eso me alegro mucho de que David te tenga a su lado ahora que más te necesita. 

―Por supuesto que si―dije―Y le tome de las manos mientras le iré fijamente a los ojos. 

Parece que esta boda si que va a celebrarse. 


19

El resto de la cena transcurrió tranquilamente. El tema del señor Rockefeller no volvió a tocarse y poco a poco mi madre con su elocuencia y entusiasmo por el reciente compromiso logró levantarnos el animo a todos. Incluso llegó a sacarles sonrisas a David y Elvira contando anécdotas sobre nuestra infancia y lo adorables que éramos. 

David se puso rojo y yo no podía parar de reír. Me tomó de la mano y yo le miré y en ese instante sentí que el tiempo no había pasado. Que habíamos acabado de entrar a la Uni y estábamos tan felices de vernos que el mundo exploto. Como nos besuqueábamos entre clase y clase y como nos escabullíamos hacia la habitación del otro cada vez que podíamos.  

Me alegra saber que ese David está justo ahí y no se había ido a ningún lado. 

Nos despedimos de su madre y la mía y me regresó de vuelta al hotel como todo un caballero. Me dejo ir con un beso tierno y un abrazo, le dije que me tenía para lo que necesitaba y él agradeció desde lo más profundo de su corazón. Sonreímos. Y se marchó.

Ahora estoy en el ascensor. esperando a que llegue a mi piso. Y pensando... en el montón de cosas que han pasado en estos días. 

¿Y si el motivo por el que David empezó a cambiar era porque sospechaba que su padre estaba enfermo? ¿Desde cuando lo sabe? ¿Y por que no me lo había contado antes? De seguro ese es el motivo por el que había estado tan encima mío... solo por preocupación. Y yo llamándole intenso. 

Algo vibra en mi bolsillo. Mi teléfono. 

Gracias por estar conmigo rosita. Es un mensaje suyo. 

Lo leo y respondo con un corazón rojo. 

Mi madre está contentísima y la suya parecía agradecida de que estuviera a su lado. Y si lo peor llegará a pasarle al señor Rockefeller David lo heredaría todo y yo... también como su esposa. Dios mío. Mi madre debe de estar bailando en el jet que la lleva de vuelta a casa. 

Las puertas se abren y comienzo a caminar por el corredor de paredes rojo vino y lámparas finas. 

Me siento poderosa y confusa. Me siento emocionada pero asustada, me siento feliz y triste a la vez. me siento...¿Será que así se siente una después de que le piden matrimonio? 

Entró a mi habitación y enciendo la luz. El servicio de habitaciones ha pasado por aquí. Está todo recogido y huele a orquídeas. Me encanta. Me estoy haciendo fans de las fragancias gracias a este hotel. 

Estoy por cerrar la puerta cuando recuerdo... ¡La píldora! Mierda la píldora del día después. Espero que Richard la haya comprado porque ya es muy tarde para ir a ninguna farmacia o droguería.

Menos mal que todavía no me había acostado porque sé que cuando caiga no habrá dios que me levante de la cama. 

Por suerte su habitación está justo al lado de la mía y yo tengo todas las tarjetas. Deslizo la suya suavemente por la ranura y... You may go in. Excellent. 

Las luces están encendidas, pero esto está vacío, la cama no destendida pero se nota que alguien ha pasado por ella y el televisor encendido. No me puedo creer que hayan salido. Pero bueno es casi mejor que ahora ni estén aquí. 

Me acerco tan sigilosamente como los tacones me lo permiten y comienzo a buscar en los cajones. 

Pero de nada sirvió. Todos vacíos. 

Me pareció buena idea chekear en el armario cuando... se abrió la puerta. ¿Pero qué puerta? No puede ser la que da al corredor. Está completamente cerrada.

Me quedó intacta y sorprendida ante tal visión que el noventa y nueve por ciento de las cncowners mataría por tener. Richard Camacho con su pantalón pijama blanco, torso tatuado desnudo y el pelo mojado y revuelto y Christopher Velez envuelto en una toalla también con el pelo y el pecho desnudo mojados. 

―¿Se puede saber qué estaban haciendo los dos juntos dentro del baño? 

―¿Se puede saber por qué estás husmeando en nuestra habitación?―dijo Chris. 

―La píldora que te pedí―le dije a Richard intentando disimular. 

No tenía ni idea de si Chris sabía lo que había pasado o no pero si no no me convenía que se enterara. Se vería muy poco profesional y no pensé que después de lo de Erick lamiéndome fuera a caer más bajo. 

―Justo aquí―dijo Camacho que entró al baño y salió con ella en la mano. 

Me acerque para que  me la diera pero la escondió detrás de su espalda. ¿A qué están jugando ahora?

―¿De dónde vienes tan hermosa?―preguntó Chris y yo me encogí de hombros. 

―A ustedes que les importa―sonreí. Hoy estaba particularmente osada y eso me encantaba. 

―You know that We miss a party today... because of you. 

―Really? Im so sorry bae I hope you can make it to the party tomorrow. 

Hice pucheros y ellos comenzaron a reírse. No pensé que fuera posible echarse a dos de los chicos de CNCO en el bolsillo. Pero al final todo depende de la actitud y dejar los nervios a un lado. Debe de ser el poder que me dan los tacones y el anillo. O porque ya he visto más de Camacho de lo que podía pedir. 

―te lo dije man―le dijo Richard a Chris. 

¿A qué habrá referido con eso? 

―TN TN TN―dijo Velez negando con la cabeza― Encerrarnos no está bien― y comenzó a caminar acercándose a mi. 

Me quede de pie en el mismo lugar, inmóvil y relajada. Si mantenía está actitud no iba a dejarme intimidar. 

―Tranquilo Chris―le dije―Solo estoy aquí por mi píldora. Mañana tendremos una charla profesional cuando estemos todos juntos. 

Esto pareció hacerles mucha gracia. Ambos se echaron a reír y Richard me miró de arriba abajo. 

―Don't keep pretending... bae―y volví a sonreír―. Sabemos que no estamos aquí solo por la píldora. 

Ay Ay Ay. Richard Camacho y Christopher Velez. Tuve que sonreír una vez más y morderme el labio. Tienen razón, acaban de pillarme. No estoy aquí por la píldora. Estoy aquí por más. 


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