30 Sofí se desnuda
Chris estaba repartiendo las cartas y nadie había bebido vino excepto yo. Sofí se había hecho con la silla de Erick y ahora él estaba sentado junto a Richard .
La situación no puede ser más increíble. Desde que ella llegó su mirada y la mía no se habían cruzado ni una sola vez y no quedaba por mi parte porque yo aunque no quiera le miro todo el rato.
—¿Cómo se te da el poker Sofí?—preguntó.
Kimi sitidi ilpiki Sifi. Puse los ojos en blanco.
—Bastante mal—dijo ella—nunca he tenido cabeza para entender estas cosas.
—Entonces eres igual que Mariana—intervino Richard y todos soltamos una carcajada.
Mire mis mano y vi que me habían tocado cartas normalitas. No quería arriesgarme a perder en la primera partida así que me retiré. Erick también lo hizo e igualmente Richard, luego Chris y por último brother. Era muy curioso porque ahora solo quedaban las primas.
—Si me ganas no te vuelvo a invitar—dijo Mariana.
—Ni te preocupes nena porque no tengo idea de lo que estoy haciendo—contestó sofí con una risita.
Y dijo la verdad, porque Mariana que ya tenía experiencia de la noche anterior la aplastó con dos parejas sobre una carta alta.
—Ay me ganaste bruja. ¿Ahora qué tengo que hacer, sacarme la blusa?
—Eso es muy poquito—dijo Mariana—nosotros ponemos castigos más fuertes.
—Pero es el primero, tampoco vayas a exagerar.
—Bueno...
Mariana dudó por un segundo. Para mi sacarse la blusa de primera definitivamente no sería sencillo. No sé que clase de cosas tenía en su mente cuando pensaba que eso era poco.
—Bueno te voy a poner dos castigos suaves y así entras en calor. Sácate la blusa y dale un beso al chico que tu quieras.
Christopher golpeó la mesa con las manos y todos los chicos soltaron risitas. A mi no me gusto para nada. Apreté los puños encima de la mesa mientras veía como Sofí se giraba para besar los labios de Erick. Él aprovechó para agarrarla de la cintura y vi que le respondía el beso con empeño.
Mire al suelo porque no podía soportarlo y trate con todas mis fuerzas de contener la lágrima que amenazaba con salir de mis ojos.
—Ay ya ya ya—dijo ella apartándose fingiendo recato. Erick tenía una sonrisa de par en par. Se notaba que le había gustado.
—Ahora la blusa—intervino Mariana—Dale que no tenemos toda la noche.
De hecho. Si que teníamos toda la noche. No había luz ni nada mejor que hacer.
—Es que me da un poquito de pena.
—¿A ti que eres una zorra? No te creo.
—Amor dale un impulso—dijo brother dandole un estirón al tirante del body suit de Mariana.
—Está bien, está bien
La rubia deslizó sus tirantes dejando a la vista sus turgentes tetas, pequeñas pero bien paraditas y con los pezones grandes y rosaditos. Sofí al verla la imito, se sacó la blusa por la cabeza y nos dejó ver sus pechos casi inexistentes, la aureola era tan pequeñita que parecía que tenía una mancha en la piel y sus pezones eran apenas pequeños relieves.
—Bueno ya avancen.
Al parecer para los chicos las tetas ya no eran una novedad. Ni Chris, ni brother ni Richard mostraron un comportamiento demasiado raro, en cambio Erick sí que le miraba los pezones. Me acordé de como ayer me los miraba a mi y tuve que apretar el puño otra vez. Tenía ganas de golpear a alguien.
Chris repartió las cartas otra vez. Mi combinación nuevamente dejaba mucho que desear así que me retiré. Sofí volvió a perder, pero esta vez el ganador fue el mismo Chris.
—Mira ver primo no te pases.
—Sofí tenemos que ser duros sino nos vamos a aburrir.
—Bueeeeno dale dime.
—Deja que Erick te quite el pantalón y que te meta los dedos.
—Epa, pero bueno...
Y tras un pequeño debate no tuvo más remedio que ponerse de pie. Se paró dándole la espalda a Erick y con el frente hacia mi. Esto es una tortura que no sé como denter.
Vi como su pantalón cedía poco a poco fácilmente, eso solo podía significar una cosa, su culo no era muy grande, porque aunque estaba de frente a mi si hubiera tenido el culazo de mariana otro gallo hubiera cantado. La tela cayó al suelo enseguida y sus blancas piernas que convergen en una entrepierna depilada con algunos vellos formando un corazón había quedado expuesta. Ella abrió los pies haciendo una cuclilla y enseguida vi los dedos de Erick aproximandose por debajo y colandose dentro de su sexo. Ella soltó un gemido y él una sonrisa. ¿En serio se ha olvidado tan rápido de mi? ¿Por qué ni siquiera es capaz de mirarme a la cara?
—Ay pero que rico. ¿Dónde aprendiste a dedear así?
Ya era suficiente, no podía aguantarlo más. Una lagrima se me escapó y se deslizó por mi rostro. Temí que me descubrieran así que incliné la cabeza hacia atrás y me alarmé cuando sentí una mano en mi pierna. Era brother, le mire con los ojos bien abiertos y el me susurro moviendo los labios que estuviera tranquila, que podía con esto. Luego sus dedos subieron hasta mi entrepierna y se colocaron sobre mi clítoris moviendose en círculos.
Con cuidado de que nadie me viera me sequé la lágrima y abrí un poco más las piernas dejando que brother hiciera presión en mi botoncito. A mi lado Sofí se retorcía de placer mientras los dedos de Erick se perdían dentro de su vagina.
—Ay en serio Erick que rico. Mete otro.
Desde mi posición pude ver como Erick se mordía el labio antes de chuparse los dedos y luego curvar dos dentro de Sofí que soltó otro gemido prácticamente en mi cara. Yo también me tuve que mover el labio, pero de la rabia. Por suerte brother puso otro dedo sobre mi clítoris y los comenzó a mover con más intensidad.
No puedo negar que sus caricias hicieron que la humedad se esparciera por mi sexo además de que los gemidos de Sofí también contribuían a la causa.
—Ay si un poquito más duro y me corro.
La chica se inclinó hacia delante y dejó que sus pequeñísimas tetas me rozaran la cara. Se disculpó pero no se movió. Prácticamente tenía un pezón en mi boca mientras ella se inclinaba y se ponía casi que a cuatro patas con el culo apuntando hacia erick y las nalgas bien abiertas. La mano de brother no se detuvo y se movio repartiendo la humedad de mi sexo de arriba hacia abajo. seguro que la pequeña tanga ya estaba empapada.
—Tiempo, se acabó—dijo Chris y Sofí se quejó.
—Pero que poquito, deja que siga un poco más.
—Así son las reglas perra—le dijo Mariana— y compórtate un poquito. te acabamos de ver todo.
—pero tú me dijiste que así era como se jugaba.
Los dedos de Erick salieron bien mojados y pegajosos de dentro de la concha de Sofí. Ella enfadada se volteó hacia él y se los llevó a la boca. Ahora tenía su culo frente a mi. No era tan grande como el de Mariana, de hecho era hasta más pequeño que el mio pero en la posición que tenía se podía apreciar su vagina bien abierta.
Luego de que ella chupara los dedos de Erick y los dejara limpios volvieron a darse un beso. Yo traté de no mirar con todas mis fuerzas porque eso era ya por gusto y no por castigo. Chris repartió cartas otra vez y la verdad entre la rabia y las mano de brother en mi sexo no había dios que se concentrara. Perdí contra Mariana porque pensé que podía conseguir un color.
—Uy Sis creo que nunca te había ganado.
—No—dije pasandome la lengua por los labios. Ahora mismo tenía la mano de su novio en todo mi sexo y ella no tenía ni idea.
—¿Quieres que te ponga algo fuerte o suavecito?
—Lo que tu quieras Mariana. Estamos jugando.
Mi voz lo decía todo, ya no tenía ni energía ni ánimos. Ya a nadie le importaba que yo jugara. Todos estaban concentrados en Sofí que linda es Sofí esto Sofí lo otro. Mi noche fue ayer y ya pasó, ya me da igual que castigo me ponga.
—Bueno... ¿Por qué no pruebas el semen de una vez y se la mamas a Richard?
Mis ojos se abrieron como platos, la mano de brother detuvo su movimiento y el moreno que estaba tomando vino casi que lo escupe.
—Yo what?
—Si. Sis insiste en que ya está grande. Ya es hora de que chupe una polla. ¿No es cierto?
0 Comentarios